Movilizados 2.500 voluntarios para la recogida de alimentos

Primero fue la crisis financiera, luego llegó la sanitaria con sus ERTE y para colofón, la humanitaria desatada por la invasión de Ucrania a la que ha seguido une energética, el alza de precios, la inflación... Entre todo ese caos se mantiene viva la actividad del Banco de Alimentos de Bizkaia que arranca el año, uno más en su incansable lucha porque ninguna persona pase hambre, con ganas e ilusión.

De momento han recuperado a su cuerpo de voluntarios. Y eso es motivo de alegría para Luis Crovetto, presidente de esta institución, que se estrena en el cargo -que no en la entidad, donde lleva más de una década- con la campaña de primavera.

Los días fuertes, a pie de comercio, serán los días 6 y 7. Y allí mismo donde acaban las cajas registradoras volverán a lucir los petos del Banco de Alimentos. Aproximadamente unas 2.500 personas que habitualmente colaboran con estas campañas de recogida recuperarán su lugar y funciones en los doscientos establecimientos que operan en Bizkaia bajo las marcas de Eroski y BM.

Eso será el viernes y el sábado, pero durante toda la semana es posible adquirir los bonos (por valor de 10, 20 o 30 euros) con los que el Banco de Alimentos adquiere productos de primera necesidad y que durante la pandemia aliviaron a más de veinte mil personas.

Esta ocasión convivirán ambos modelos porque, como explica Crovetto, también hay personas que prefieren hacer una donación económica. Y es que todo suma. Tal y como apostillaban desde el Banco de Alimentos de Bizkaia esta campaña de primavera "es muy necesaria" para paliar la situación de las familias más vulnerables debido a la crisis sanitaria, energética y la inflación, "y atender a las personas refugiadas ucranianos" que han llegado en las últimas semanas a Bizkaia.

Voluntarios del Banco de Alimentos de Bizkaia. Foto: Haizea Berrocal

"Las condiciones socieconómicas derivadas de la crisis económica y de la inflación hacen muy necesaria esta campaña para que podamos continuar nuestra labor a favor de los más desfavorecido de Bizkaia", subrayaban desde esta institución humanitaria. La organización confía en que la respuesta de la sociedad vizcaina sea "extraordinaria", como ha ocurrido en otras iniciativas similares promovidas por el Banco de Alimentos.

Esta nueva campaña coincide en el tiempo con la recepción del embalaje procedente de la Unión Europea cargado con 465 mil kilos de alimentos de carácter básico, variados, nutritivos, poco perecederos y de fácil transporte y almacenamiento que serán distribuidos en próximas fechas entre las personas que así lo requieran.

El proceso arrancará, precisamente, la próxima semana; justo cuando haya finalizado esta próxima recogida de alimentos y productos de primera necesidad: leches infantiles, legumbres, higiene femenina....