El diputado y exjefe de las milicias prorrusas de la provincia ucraniana de Lugansk, Mijail Filiponenko, ha muerto este miércoles tras sufrir un atentado con coche bomba en la autoproclamada república, que se encuentra en el este de Ucrania.
El político, que ha contado con el apoyo de Rusia, ha fallecido "en el acto" debido a la fuerte explosión, según ha informado su hijo, Ivan Filiponenko, en declaraciones recogidas por el diario 'The Moscow Times'.
Así, ha explicado que un artefacto explosivo colocado en el vehículo de Filiponenko explotó, provocándole "heridas incompatibles con la vida". La explosión ha provocado graves daños a la puerta del conductor.
Por su parte, la Inteligencia ucraniana ha reivindicado la autoría del ataque y ha indicado que se enmarca en una "operación especial para eliminar" al político, al que han calificado como un "criminal de guerra".
"Estaba implicado en la organización de campos de tortura en los territorios ocupados de la región de Lugansk, donde los prisioneros de guerra y los civiles secuestrados eran sujetos a tratos inhumanos y tortura. Filiponenko, personalmente, torturó brutalmente a personas", ha indicado la Dirección General de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania en un comunicado.
En este sentido, ha alertado de que la Inteligencia ucraniana está al tanto de "los lugares de residencia y de trabajo de todos los traidores que sirven a la terrorista Rusia en los territorios temporalmente ocupados". "Todos los criminales de guerra y colaboradores recibirán su merecido", ha puntualizado antes de matizar que la "caza continúa".
No es la primera vez que Filiponenko era objeto de un atentado. En febrero de 2022, su vehículo sufrió otra explosión frente a una oficina de representación de la autoproclamada república. Filiponenko sobrevivió, pero el conductor del vehículo resultó gravemente herido.