El atleta keniano Kelvin Kiptum, de 24 años, plusmarquista mundial de maratón, perdió la vida este domingo en un accidente de tráfico junto a su entrenador, el ruandés Gervais Hakizimana.
Según adelantaron los medios del país africano 'The Standard' y 'Nation' citando a fuentes de la familia y de los agentes policiales que intervinieron en el accidente, Kiptum falleció junto a su entrenador y una mujer cuando viajaban en coche por la carretera que une Eldoret con Kaptagat (Kenia).
La trágica noticia deja al mundo del atletismo sin uno de sus mayores atletas actuales. Kiptum estableció el año pasado en Chicago un nuevo récord del mundo de maratón, donde se convirtió en el primer hombre de la historia en bajar del 2:01 al parar el crono en la ciudad estadounidense en dos horas y 35 segundos.
El keniano, que había ganado los dos maratones disputados anteriormente, el de Valencia 2022 (2:01:53) y el de Londres 2023 (2:01:25), se consagró en la cita americana rebajando 34 segundos el récord que había establecido su compatriota Eliud Kipchoge en Berlín en 2022, con un futuro que prometía bajar de las dos horas.
La Federación Internacional de Atletismo, World Athletics, no tardó en lamentar la pérdida de un "increíble atleta" que dejó "un increíble legado". "Estamos muy apenados por saber de la devastadora pérdidas de Kelvin Kiptum", dijo su presidente Sebastian Coe.
Coe, que envió su pésame a familiares y amigos, confesó que esta misma semana había estado en Chicago ratificando su histórico récord del mundo. Kiptum, que nació en Chepsamo, a 30 kilómetros de Eldoret, era uno de los mayores talentos recientes del atletismo.
El keniano empezó a correr a los 13 años e hizo su debut internacional en 2019, terminando quinto en el medio maratón de Lisboa, mejorando después su marca en 2020 en Valencia. Después, Kiptum se pasó al maratón ganando cada vez que atacó los 42,195 kilómetros hasta su récord del mundo en Chicago.
El próximo reto del plusmarquista estaba señalado para el maratón de Róterdam en el mes de abril, donde se había puesto el objetivo de bajar de las dos horas. Una marca que sí logró romper Eliud Kipchoge en Viena en 2019, aunque con todo un montaje a su alrededor que no le dio la condición de oficial a su récord (1:59:40).