Cultura

Nace Gael, nuevo espacio escénico dedicado al microteatro en el Casco Antiguo de Pamplona

El primer ciclo de la sala de la calle Tejería 28 tendrá lugar los días 10, 11, 12 y 13 de noviembre
Toño Esparza, Giorgio Jover, Joanna Moya, Gorka Barandiaran, Dhamelyz Figeredo y Nelly Poghosyan.

Crear una sala de microteatro como las que ya son tan habituales en otras ciudades, con historias que “atraviesen al público” y “lo transformen” en apenas unos minutos, y servir de espacio para que quien está comenzando en las artes escénicas y resida en Navarra pueda “sacar el talento que llevan dentro” y dar los primeros pasos de su carrera. Estos son los dos objetivos principales que se propone el espacio creativo Gael, abierto en mayo en el nº 28 de la calle Tejería, donde durante años funcionó IPES, y que la semana que viene lanzará su proyecto piloto: un ciclo de microteatro que se desarrollará los días 10, 11, 12 y 13 de noviembre.

Gael nació en la mente de Nelly M. Poghosyan, actriz formada en la Escuela Navarra de Teatro que antes de dedicarse de pleno a las tablas se licenció en Economía y fue ejecutiva de una multinacional. Oriunda de Armenia, ha vivido en Francia y en México y desde hace ya tiempo reside en el corazón de Pamplona, donde ha actuado en varios montajes y donde dio a luz a Gael. “Se llama así porque cuando estaba embarazada, pensé en ese nombre para niño”, cuenta. Finalmente fue niña y se llamó Gabriela, así que Gael es, de algún modo, “el hijo que nunca tuve”, cuenta la actriz y directora de este proyecto cuya creación “ha sido muy parecido a un proceso de gestación”. “He tenido los miedos que tenía como madre primeriza. En muchos momentos se echa de menos los apoyos del Estado a los autónomos que existen en otros países como Francia. El parto fue dificilísimo y la crianza está siendo dura; pones mucho esfuerzo y cariño y a veces los resultados no son los que esperabas; por eso muchos proyectos culturales pierden la ilusión y tiran la toalla antes de un año”, dice.

Interior del nuevo espacio escénico GAEL Iban Aguinaga

Método y proceso

La actriz y directora de Gael está, sin embargo, convencida del paso que ha dado y más desde que su camino se ha cruzado con el de Johanna Moya. “Yo tenía la idea, el espacio, la gestión, y en ella encontré la metodología. Nos complementamos muy bien desde el principio”, apunta. Actriz y directora formada en Barcelona en la Técnica Meisner, Moya, natural de Ecuador y vecina de Pamplona, es especialista en microteatro y en Gael ha desplegado un método de trabajo en tres fases.

La primera es el laboratorio. Dura tres meses y en él pueden participar, sin coste, artistas en formación o recién titulados. “Necesitamos que dispongan ya de herramientas escénicas, porque esto no es una escuela”, aclara Poghosyan. En esta etapa, “hago un acompañamiento a los participantes para que descubran qué historias quieren o necesitan contar y para que se hagan responsables de ellas”, agrega Moya. El primer laboratorio arrancó en mayo y en él tomaron parte seis creadoras/es, de las/os cuales tres pasaron a la segunda fase: la residencia. “Somos totalmente honestas y decidimos entre todas en función del momento en que está cada historia”, indica la profesora, que en este tramo del proceso ejerce la dirección. “Ensayamos y tratamos de extraer la humanidad de cada historia, sin juzgar a los personajes, para presentar al público “propuestas que importen y que generen empatía en el público”.

Por último, llega la tercera fase: la exhibición. “Queremos ofrecer a los proyectos el proceso completo para que puedan estrenar aquí y luego ser independientes”, continúa Johanna Moya. Y es que, como recuerda Poghosyan, Gael quiere dar a las/os artistas “la oportunidad de iniciarse”; de ahí el lema del espacio: “Tu triunfo es mi victoria”.

Cercanía con el público

Y qué mejor para empezar que el microteatro, opinan las impulsoras de esta iniciativa. “Es un género en el que se entrena mucho, porque se repite mucho, y el teatro es entrenamiento”, señala Moya, a lo que su compañera añade: “Aquí no queremos hacer formato largo, eso ya se hace, y muy bien, en otros lugares de Pamplona y de Navarra”. Su apuesta es el pequeño formato porque, “aparte de Microstable, que es una vez al año, no hay salas que programen microteatro como sí se está haciendo cada vez más en otras ciudades”. “Como actrices nos encanta esa cercanía con el público; la distancia entre el escenario y la butaca es otra cosa, en este caso es como si estuvieras viendo teatro en el salón de tu casa”, comentan. “Apostamos por tocar al público de cerca, de manera que viva lo que estamos contando”. De hecho, en septiembre celebraron unas sesiones de microteatro con compañeros de Moya de Barcelona, “y fue emocionante ver cómo las personas que vinieron se vieron atravesadas por las historias”.

Por todo esto, y a modo de “proyecto piloto”, han programado su primer ciclo, que tendrá lugar los días 10, 11, 12 y 13 de noviembre con tres piezas que se irán representando a lo largo de las cuatro jornadas (los horarios se pueden consultar en teatrogael.com). Se trata del díptico Goazen y El aire entre las hojas, de Toño Esparza; de Antes de ti, de Braulia Guilabert, y de Granate, de Gorka Barandiaran. Este último se muestra satisfecho con el proceso que ha experimentado desde mayo. “Nos ayudan a buscar en las entrañas historias que tengan importancia para nosotros, así que lo que finalmente sale es muy honesto. Sin el acompañamiento del laboratorio y de todo el proceso sería imposible”, afirma Barandiaran.

Toño Esparza comparte su opinión y apunta que, en su caso, ha intentado crear piezas pequeñas “desde las que se pueda transformar a las personas; que no salgan de aquí igual que entraron”. Giorgio Jover, se unió como actor a la fase de residencia de Antes de ti, “un texto muy potente” que asegura que llegará mucho a las/os espectadoras/es. Y Dhamelyz Figeredo también es actriz, en su caso de Goazen, subraya que en Gael “todas las partes del proceso, del viaje, suman”.

En comunidad

Nelly M. Poghosyan y Johanna Moya saben que les queda un largo camino por delante para consolidar un proyecto que recién empieza, y que esta profesión “puede resultar solitaria y estar llena de altibajos”. Por eso “es importante crear una comunidad artística, una red”. Como la que están tejiendo en Gael.

03/11/2022