Concluye su ensayo afirmando lo que sigue: “Aunque la historia que se nos enseña, en general, está plagada de mitos, tergiversaciones y falsedades, en prácticamente ningún otro episodio se acumulan tantas, tan mal intencionadas y tan demostradamente falsas pero, sin embargo, sostenidas aún por muchos por ignorancia, cobardía o mala fe”.
–Este es un ensayo publicado a nivel académico por Eusko Ikaskuntza. Ha sido revisado e incluye multitud de citas y fuentes. No he descubierto un secreto escondido, lo que cuento lo sabe todo el mundo. Hasta 2020 muchas de las obras sobre este tema repetían lo que decían las anteriores por inercia, por falta de profesionalidad. Pero a partir de 2020 se sabe que mucho de lo que se ha contado no es verdad, que el Elkano Imperial es un invento y un despropósito. Todo se sabe pero se mantiene: durante mucho tiempo se han publicado libros, redactado tesis doctorales y hombres con pajarita han salido en programas de televisión contando cosas que son un auténtico disparate; ya no se pueden echar atrás.
¿Qué ocurre en 2020?
–Cuando comenzó la celebración del quinto centenario en 2019 a nivel estatal hubo muchísimas conferencias, artículos en todas partes... En 2020 la Real Academia de la Historia cambia la fecha de nacimiento de Elkano a la correcta, de 1476 a 1487. Esto hace que todo el relato del Elkano Imperial se vuelva un disparate aún mayor. Ante esto se apuesta porque todo en relación a su figura pase desapercibido, pero a la vez se fomenta una idea, un eslogan sencillo, el de “Elkano caca”.
¿Ha habido una huida hacía adelante por parte de los historiadores o instituciones que defendían la idea el ‘Elkano Imperial’?
–Hasta 2020 hubo errores en cuanto a la figura, a partir de 2020 lo que hay es mala fe.
¿Quién se encargó de escribir esta historia?
–La vergüenza de este país es que la Historia la ha escrito la derecha católica y Franco. Después de la transición fallida que vivimos, las facultades de Historia se han convertido en simples formas de repercutir la propaganda de un régimen nacional católico que permanecieron intactas. Los hombres que las dirigían siguieron haciéndolo.
¿No puede tratarse de una diferencia de interpretación de la figura?
–Si se tratase de diferencias de interpretación habría debate, pero aquí nadie quiere debatir. El debate se evita porque no hay por dónde sostener la idea principal, que es la del Elkano Imperial, aunque hay muchas más. La Fundación Elkano ha intentado que hubiese debate, por activa y por pasiva. No lo ha conseguido. De hecho, desde 2020 no hay ningún artículo académico sobre Elkano, además de este libro. Ningún académico, ningún historiador, nadie que tenga un prestigio que perder, ha vuelto a publicar un texto académico sobre Elkano.