La portavoz del Gobierno de Navarra y consejera de Interior del Gobierno de Navarra, Amparo López, ha manifestado que no se esperan "grandes afecciones a núcleos urbanos" por la crecida de los ríos al sur de Navarra, tras el episodio de intentas lluvias que ayer causó afecciones en la mitad norte.
La portavoz del Ejecutivo ha explicado el Gobierno de Navarra tiene activada la situación 1 del plan de inundaciones y, en el ámbito local, se han activado los planes en diferentes niveles. "A lo largo del día se van a ir desactivando estos planes a medida que la situación se vaya normalizando", ha dicho.
López ha explicado que "no se esperan grandes afecciones a núcleos urbanos" y el martes "sólo hubo una afección a núcleo urbano, que fue en Villava, y el resto de previsiones eran a campos de cultivo".
No obstante, ha señalado que "en Castejón ha saltado una mota, que está cerca de la carretera N-113 y la punta del Ebro todavía no ha llegado, por lo que es posible que cuando llegue se corte la carretera". "Ya están informadas Policía Foral y Obras Públicas y se está trabajando en la señalización oportuna. Creemos que sea difícil que alcance la AP-15, que podría ser lo más importante", ha apuntado.
Respecto al Ebro, ha señalado que los afluentes "están llegando al río, donde se espera el mayor caudal". "Esta avenida se acerca hacia el sur de la comunidad. A Tudela llegará sobre las 2:30 de la madrugada, con un caudal que va a superar los 2.000 milímetros cúbicos por segundo", ha explicado.
El Arga ha tenido su máxima punta a las 9.30 horas en Funes, superior a 2.000 metros cúbicos, que "es la franja en la que tenemos el límite establecido con afecciones a ámbito más urbano o que pueda tener una mayor consideración". "Nos vamos a quedar ahí, en esos límites", ha expuesto, para añadir que el río Ega ya ha pasado la punta y está decreciendo, sin generar afecciones a los núcleos urbanos.
Por otro lado, la consejera ha informado de que en Olazti se han derribado unos pilotes de hormigón, lo que está afectando al tráfico del pueblo y se está desviando. "Obras Públicas ha movilizado al geólogo, que está trabajando sobre el terreno y, a lo largo del día de hoy, esperamos que la normalidad vuelva a su cauce", ha señalado.
En Pamplona, más preocupación por el viento
El Ayuntamiento de Pamplona ha desactivado el nivel de emergencia del Plan de actuación ante el riesgo de inundaciones ya que los niveles que en estos momentos marcan los caudales a su paso por Pamplona "no obligan a realizar medidas extraordinarias en este sentido".
En concreto, desde el Consistorio han indicado en sus redes sociales que dado que "el caudal del Arga a su paso por la ciudad ha bajado a 92 metros cúbicos por segundo, y a que las previsiones existentes son favorables", Policía Municipal ya ha abierto los aparcamientos que se cerraron desde el comienzo de la riada: Corralillos, Trinatarios I y Trinitarios II.
La zona del Club Natación / albergue de Paderborn, requiere aún de una limpieza previa para quedar habilitaada. Por ello el Consistorio ha decidido mantener suspendida la zona azul en la Rotxapea hasta las 16:00 de este miércoles.
En estos momentos aún se encuentran cortados al tráfico rodado y peatonal y en revisión el Camino de Burlada, el Camino de Caparroso, los accesos a la finca de Goñi y al Club Natación, así como los puentes peatonales de Errotazar a Aranzadi, a la altura de Grupo San Pedro, y el de San Jorge hacia Trinitarios.
También están cerrados el paso peatonal bajo el puente de Oblatas, el paso peatonal de la calle Sadar que atraviesa por debajo la avenida de Zaragoza, junto al parque Orfeón Pamplonés, y el tramo del parque Fluvial que discurre entre Curtidores y Vergel. A lo largo de la mañana Policía Municipal irá reabriendo espacios y trayectos y retirando los elementos de seguridad colocados en las últimas horas.
El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, ha afirmado que este miércoles el río Arga "ha bajado bastante" ya que se encuentra en torno a los 90 metros cúbicos por segundo -frente a los más de 300 registrados este martes-, con lo cual "ya podemos decir que poco a poco volvemos a la normalidad", si bien ha subrayado que en estos momentos hay "más preocupación" por las rachas de viento.
Como balance del día de ayer tras las intensas precipitaciones registradas, el alcalde ha indicado que "las previsiones se cumplieron, diría yo casi milimétricamente". "Funcionaron francamente bien los dispositivos que se pusieron en marcha la víspera, tanto desde Seguridad Ciudadana como de Acción Social, para liberar las zonas inundables de coches y también para la gente que estaba por la calle, para llevarla al refugio de Trinitarios. Ayer fue un día, dentro de lo que cabe, con normalidad", ha dicho.
En cuanto a la previsión para los próximos días, ha señalado que "de momento no tenemos otra alarma a la vista". "Me han dicho que había más preocupación con las rachas de viento, aquí pasamos de una cosa a otra, pero el río lo previsible es que poco a poco vaya volviendo a la normalidad", ha remarcado.
Situación en carreteras
Aunque lo peor del temporal de lluvia, y también de nieve en el Pirineo, ha pasado, Navarra amanece con las consecuencias de las lluvias en forma de carreteras cortadas en toda su geografía. En lo que se refiere a la red principal de carreteras, la A-1 permanece cortada en sentido Irun a la altura de Olazti, donde ayer por la mañana se produjo un desprendimiento que obligó a cortar por completo la carretera y las retenciones afectaron a esa zona de Navarra y hasta Araba.
En la zona norte de la comunidad desde primera hora de la tarde de ayer está cortada la carretera que conecta Leitza, Goizueta y Hernani. En la Zona Media, la NA-6140 de Tafalla a Miranda de Arga.
Además, por la nieve, es obligatorio el uso de cadenas en la NA-2000 Isaba-Zuriza. Están cerradas al tráfico la NA-2012 Ochagavía-Irati, la NA-2011 Salazar-Francia desde el kilómetro 7 y la NA-137 Burgi-Isaba-Francia desde el punto kilométrico 47. También está cortada por problemas derivados de la meteorología NA-140 Burguete-Isaba en el kilómetro 52.