Navarra cierra 2022 con un superávit de 285 millones y 3.158 millones de deuda

Navarra cerró el ejercicio de 2022 con un superávit de 285 millones, el equivalente al 1,275% del PIB. Una cifra mucho mejor de lo que se había previsto al inicio de año –se había habilitado la capacidad de recurrir al déficit– y que viene motivada por los buenos datos de recaudación que dejó el ejercicio.

Inicialmente, las necesidades de financiación de la Administración Pública para el pasado año se estimaron en 442 millones. De este importe, 243 millones iban dirigidos a la refinanciación de los vencimientos ordinarios y el resto a financiar del déficit previsto de 199 millones. La buena evolución de los datos ha permitido sin embargo que no haya sido necesario recurrir la endeudamiento, con lo que la cifra de deuda oficial quedó a 31 de diciembre pasado en 3.158 millones, prácticamente lo mismo que el año anterior (3.146 millones).

Según los datos avanzados ayer por el Ejecutivo foral, el pasado año finalmente se ejecutó el 93,1% del presupuesto. Lo que supone una cifra de 5.600 millones, frente a los 6.000 inicialmente previstos. Son en cualquier caso 500 millones más que el año anterior. Por su parte, en cuanto al presupuesto de ingresos, el ejecutado asciende al 98,2%, 5.908 millones.

En principio, el superávit será destinado a la amortización de deuda pública, según avanzó ayer el propio Gobierno foral. “La normativa de estabilidad presupuestaria obliga a utilizar esa capacidad de financiación para la reducción del endeudamiento público”, argumentó en una nota.

Control de la deuda

El compromiso del Gobierno de Navarra pasa por “mantener el endeudamiento público bajo control”. Los 3.158 millones de deuda pública suponen un 14,1% del PIB, frente al 16,7% que se estableció como tasa de referencia de deuda pública en el acuerdo entre Navarra y el Estado. “Ello supone que el volumen total de deuda apenas se haya modificado con respecto al año anterior manteniendo a la vez las garantías del cumplimiento de los compromisos que ha adquirido el Gobierno y para los que ha recibido financiación”, avanzó ayer el propio Ejecutivo foral. Estas cifras son un primer avance que ahora deben recibir el visto bueno de la Intervención General del Estado (IGAE).