El Gobierno de Navarra ha anunciado este lunes el lanzamiento de un segundo plan de alquiler Navarra Social Housing con 810 nuevas viviendas públicas que se construirán hasta 2026 en distintas localidades de la Comunidad Foral. Estos inmuebles se sumarán a las 520 viviendas que conforman el primer plan y que estarán ya entregadas entre este año 2023 y el siguiente.
El vicepresidente y consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José María Aierdi, ha comparecido en la mañana de este lunes para presentar el plan junto con la directora general de Vivienda, Ana Bretaña, y el director gerente de Nasuvinsa, Alberto Bayona.
En 14 localidades
En este segundo plan del Navarra Social Housing destacan nuevos mecanismos como la promoción de vivienda pública por parte de Nasuvinsa en suelo municipal cedido por las entidades locales, con el acuerdo alcanzado hasta ahora con 14 Ayuntamientos; la figura del derecho de superficie en suelo público o la colaboración público-privada con producción de vivienda protegida cuya gestión del alquiler estará en manos del sistema público.
En lo que respecta a la promoción de vivienda pública en parcelas cedidas por los Ayuntamientos, la segunda fase del Navarra Social Housing contempla la construcción de 148 pisos de alquiler repartidos en sendos solares de los municipios de Altsasu / Alsasua, Sangüesa / Zangoza, Huarte / Uharte, Lodosa, Puente la Reina / Gares, Lumbier, Baztan, Cárcar, Peralta / Azkoien, Ororbia, Lerín, Arbizu, Valle de Arce y Sorauren, a falta de la respuesta que pueda dar Pamplona / Iruña a su posible incorporación, a cuyo consistorio el Ejecutivo foral ha enviado una propuesta de convenio ya firmada por el consejero Aierdi.
Derecho de superficie
La promoción directa de Nasuvinsa se complementa, en el nuevo plan, con otras 441 viviendas promovidas bajo la fórmula de derecho de superficie, también en suelo de titularidad pública, en distintas localidades de la Comarca de Pamplona / Iruñerria –entre ellas destacan las 80 reservadas para una iniciativa de vivienda colaborativa o cohousing en Noáin- y en el municipio de Tafalla, así como otras 221 viviendas de colaboración público-privada, 37 de ellas ya finalizadas en Tudela y Cascante y otras 40 que se encuentran actualmente en obras en el Valle de Aranguren.
El vicepresidente Aierdi ha desgranado las líneas estratégicas que ha introducido el departamento que lidera con el fin de “dar un giro y primar la función social de la vivienda y su valor de uso” ante la tendencia de años anteriores de destinar “la mayor parte de la vivienda protegida al régimen de compraventa”, ha explicado, todo ello con objeto “de garantizar el derecho a una vivienda asequible y de alta calidad”, ha añadido.
Tal y como ha explicado la directora general de Vivienda, Ana Bretaña, “en total, el sistema público de alquiler del Gobierno de Navarra ha generado desde 2015, por distintas vías y gracias a distintas políticas activadas, un total de 7.327 nuevas viviendas de alquiler asequible, lo que supone multiplicar casi por diez las 769 nuevas viviendas que se fueron incorporando durante los ocho años anteriores”.
Este cambio de tendencia se refleja en los datos que muestran el aumento del parque público de vivienda de alquiler tanto a través del plan Navarra Social Housing –con 520 viviendas en una primera fase y otras 810 en esta segunda, que alcanzan un total de 1.330 viviendas- como del programa de la Bolsa de Alquiler de Nasuvinsa de pisos en desuso cedidos por titulares particulares, que en estos últimos siete años casi ha duplicado las viviendas adscritas, pasando de las 475 existentes en 2015 hasta las 902 actuales.
Colaboración público-privada
Por su parte, el director gerente de Nasuvinsa, Alberto Bayona, ha destacado que "en esta segunda fase del plan se refuerza la colaboración público-privada, mediante tres fórmulas que, en término globales, permitirán financiar las promociones con un 50% de aportación pública y el 50% restante mediante inversión privada".
Además, en el mercado libre el Gobierno de Navarra activó en 2018 los programas derivados de la Ley de Derecho Subjetivo que contemplan ayudas al alquiler tanto para gente joven (EmanZipa), como familias vulnerables con menores a su cargo (David), que dan soporte a un total de 3.022 jóvenes y 1.844 familias, respectivamente, alcanzando un total de 4.866 viviendas en las que se garantiza un arrendamiento asequible.
Rehabilitación edificios en desuso
Por último, dentro de la apuesta por incrementar la generación de vivienda de alquiler a partir de edificios en desuso en los que se acomete su rehabilitación integral, el Ejecutivo foral ha promovido intervenciones para recuperar el antiguo Hospital de Estella-Lizarra o un edificio de titularidad pública en la calle Compañía de Pamplona / Iruña y actualmente está en obras la reurbanización de la plaza del Horno de Coscolín de Tudela.
Además, el plan de rehabilitación rural prevé la promoción de otras 69 viviendas de alquiler público en distintas comarcas, a partir de la rehabilitación de inmuebles de titularidad municipal en desuso que existen en numerosas localidades de la Comunidad Foral. Un total de 24 de estas viviendas ya están ejecutadas y en otras 20 las obras se iniciarán entre los próximos meses de marzo y abril.