La comisión de Desarrollo Rural y Medio Ambiente ha aprobado este martes el dictamen de la nueva ley foral de sanidad animal, que limita las explotaciones ganaderas de vacuno (de leche y carne) a un máximo de 1.250 UGM (unidades de ganado mayor) para facilitar la prevención, el control y la erradicación de enfermedades.
En concreto, la presente norma modifica los artículos 28 y 39 de la actual ley referidos a distancias entre explotaciones y densidad ganadera, y la cuantía máxima de indemnización por establecimiento ganadero, respectivamente, y asimismo modifica el anexo 1 que establece el tamaño máximo de las explotaciones ganaderas.
Según la nueva redacción, "las explotaciones ganaderas nuevas o las ampliaciones de las existentes no podrán superar las 1.250 unidades de ganado mayor de vacuno de leche y carne, incluidas las explotaciones de ganado bravo, mientras que el tamaño máximo del resto de explotaciones no sufre modificación alguna.
A su vez, se introduce una nueva disposición adicional para permitir que las explotaciones que a la entrada en vigor de esta Ley superen estos límites puedan seguir funcionando de acuerdo a su licencia medioambiental en vigor, aunque no podrán realizar modificaciones de instalaciones o cambios de orientación productiva que supongan un aumento de su tamaño máximo.
El dictamen replantea también la disposición transitoria tercera para posibilitar que las solicitudes de autorización ganadera para instalación o ampliación de explotaciones de vacuno de más de 1.250 unidades de ganado mayor suspendidas en su tramitación se expidan de conformidad con la normativa vigente a la fecha de solicitud.
Estas suspensiones se hicieron al amparo de la ley que en 2021 estableció una moratoria para que, mientras se tramite el actual proyecto de Ley, "no se admitan solicitudes ni se concedan autorizaciones para la instalación de explotaciones ganaderas de vacuno con una capacidad superior a 1.250 Unidades de Ganado Mayor (UGM)", ni "tampoco para ampliaciones que conduzcan a una explotación resultante mayor de los 1.250 UGM". En todos los casos, "hasta el 30 de mayo de 2022".
Todos los grupos han votado en contra, salvo I-E que se ha abstenido, de una enmienda de supresión de la disposición transitoria tercera defendida por EH Bildu, para quien, "salvo noticia en contrario, no existe ninguna solicitud pendiente".
También ha decaído al contar solo con el apoyo de I-E una enmienda de modificación el artículo 1 registrada por esta misma coalición para reducir la capacidad máxima productiva de las distintas explotaciones ganaderas, en el caso de las de vacuno (leche y carne) y porcino hasta 850 y 720 UGM, respectivamente.
En cuanto a las distancias entre explotaciones se mantiene el Decreto Foral de 2019, por el que se establecen las condiciones higiénico sanitarias de bienestar animal y ordenación zootécnica, medidas todas de carácter preventivo (bioseguridad) para evitar la difusión y el impacto de enfermedades.
Las distancias se determinan teniendo en cuenta las circunstancias geográficas y las características de las especies ganaderas, el tamaño de la explotación, el tipo de explotación y el riesgo epidemiológico.
No ha prosperado la pretensión de hacer constar como criterio el carácter intensivo o extensivo de la explotación, tal y como pedía una tercera enmienda de EH Bildu y que nuevamente solo ha tenido el apoyo de I-E.
Por último, se modifica el texto relativo al sacrificio obligatorio para fijar un límite máximo de 1,5 millones de euros de indemnización por explotación en supuestos de sacrificio obligatorio en el marco de los programas nacionales de lucha, control o erradicación de la tuberculosis bovina, brucelosis bovina, brucelosis ovina y caprina, lengua azul y encefalopatías espongiformes transmisibles.
Una vez dictaminado, el proyecto de ley foral de Sanidad Animal de Navarra pasará al pleno del Parlamento, previsiblemente el día 3 de marzo, para su definitivo debate y votación.