Navarra prevé incorporar a 5.200 nuevos autónomos entre 2022 y 2025 en el mercado laboral, con un apoyo económico de 14 millones de euros –una media de unos 2.700 euros por profesional–, según incluye el borrador del II Plan de Trabajo Autónomo, presentado la semana pasada a los agentes del sector que componen el Consejo en la Comunidad Foral.
50.000 COTIZANTES EN 2006
Este plan parte con 47.501 trabajadores por cuenta propia en Navarra –datos de mayo de este año– y pretende incrementar esa cifra –pero teniendo en cuenta que junto a estas 5.200 nuevas incorporaciones, también pueden producirse bajas en el mismo periodo–. Antes del estallido de la crisis inmobiliaria, Navarra llegó a los 50.000 cotizantes a este régimen, cifra que descendió de manera drástica esos años, hasta que en 2013 contabilizó 45.000 afiliados autónomos.
A partir de ahí la estadística refleja que en los últimos seis años, el número de autónomos ha quedado estabilizado entre los 47.000 y 48.000 empleados por cuenta propia. Ahora este segundo plan quiere dar impulso a este colectivo, sobre todos, después del varapalo de la pandemia.
LAS LÍNEAS ESTRATÉGICAS
El consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo, presentó en el Consejo del Trabajo Autónomo el documento –que ahora está en exposición pública para recibir aportaciones–. El texto establece cuatro líneas estratégicas, con 31 actuaciones y 160 millones de euros: comunicación y difusión eficaz y efectiva; cualificación y competencias; fomento del empleo autónomo; y empleo autónomo de calidad y resiliente.
Entre las medidas quieren seguir impulsando nuevas altas de autónomos en el mercado laboral para fomentar la cultura del emprendimiento –una media de mil por año, con un presupuesto de 3,5 millones–. En esta línea estratégica, también seguirán potenciando el respaldo al colectivo para facilitar el acceso al crédito y financiación por medio de las sociedades de garantía recíproca Elkargi y Sonagar, con una partida de 74,8 millones durante todo el periodo –18,7 millones cada año– del que pueden beneficiarse un total de 400 personas autónomoas que "aporten valor social, medioambiental o cultural y que precisen unas condiciones diferentes a la banca comercial".
LA CONSOLIDACIÓN
Otra partida potente dispone de 66,9 millones para consolidar la actividad de los trabajadores autónomos. El objetivo de esta acción consiste en "incrementar el grado de supervivencia de las iniciativas emprendedoras a través de la mejora competitiva en su fase de consolidación –queda constatada alta mortalidad de empresas en su tercer año de vida-". Con este presupuesto, el plan persigue apoyar la cualificación profesional de los autónomos, el asesoramiento experto, la inversión productiva o el impulso de los productos y servicios de mayor valor añadido, sobre todo, en zonas rurales.
El presidente de ATA-Navarra, Juan Carlos Equiza, considera que "este plan es bueno", aunque señala "la importancia de añadir más medidas sobre asesoramiento y formación".
LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL
El coronavirus ha acelerado la transformación digital en todos los sectores y los autónomos no pueden quedarse atrás. Por ese motivo, el II Plan de Trabajo Autónomo también incide en formar a este colectivo en tecnologías de la información y comunicación (TIC).
Calcula la posibilidad de instruir a unas 4.000 personas autónomas entre 2022 y 2025 –a razón de mil cada año–, según desvela el borrador.
Para ello dispone de un presupuesto de 400.000 euros para los cuatro ejercicios. El texto reitera que esta medida persigue "evitar la brecha digital y orientar su modelo productivo hacia una economía verde". El presidente de ATA-Navarra, Juan Carlos Equiza, insiste en la importancia de "detectar las necesidades formativas tanto digitales como de otras áreas de este colectivo al ser muy heterogéneo". Pero Equiza subraya que hay que definir el método de impartir dicha formación, debido a las dificultades de compaginar su actividad laboral con cualquier curso.
KIT DIGITAL Y MODELO PRODUCTIVO
Además, el plan propone difundir y fomentar las ayudas estatales del Kit Digital, subvencionado con fondos europeos. Está previsto que en octubre se abra la convocatoria de 500 millones para este colectivo en toda España, y optar así a ayudas de 2.000 euros para invertir en servicios digitales, como confeccionar páginas web, automatizar desarrollos de negocio, comercio electrónico, facturación o ciberseguridad, entre otros. El texto también apuesta por la transformación productiva de unas 550 personas autónomas y microempresas hacia la economía verde y digital, con casi 2,74 millones entre 2022 y 2023.