En Navarra, las aguas bajan revueltas. Están en marcha las negociaciones para cerrar el próximo gobierno foral y no están llegando a buen puerto. Geroa Bai, socio del PSN en el anterior ejecutivo, le ha dado un ultimátum a los socialistas: o desbloquean los contactos o se buscan otro socio, que podría ser EH Bildu.
Desde el PSN conocen la propuesta de Geroa Bai para reeditar el Gobierno de coalición desde el 29 de mayo. Una propuesta que busca mantener la gestión de las áreas que Geroa Bai ha desarrollado. Pero la propuesta del PSN desdibuja el papel de la coalición dentro del Ejecutivo. A ese ultimátum de Geroa Bai, el PSN respondía diciendo que hicieran una contraoferta, como si esto fuera un simple mercadeo. Lo decía Ramón Alzórriz que, además, criticaba que Geroa Bai llevara la misma propuesta desde el 28-M. Dice que harán todo lo necesario para desbloquear los contactos, pero dentro de una negociación todo el mundo se tiene que mover y que ceder...Y es curioso que lo digan en el PSN cuando no ha trascendido, precisamente, muchos movimientos en su seno. Una sola propuesta no es negociar, es comunicarle al otro una decisión y ahí no hay movimiento, no hay margen. El otro puede aceptarla o no.
En esa tesitura, aparece en escena EH Bildu, que ahora se muestra favorable a apoyar la investidura de María Chivite. Dicen que preguntarán a su militancia y que no ponen condiciones pero, a la vez, abren la puerta a desalojar a UPN del ayuntamiento de Pamplona. Este es el precio de darle su apoyo a María Chivite. Si esto no es una condición, que baje Dios y lo vea.