Vida y estilo

Ni las nueve de la mañana ni las ocho de la tarde: ¿cuál es la mejor hora para hacer ejercicio?

El momento del día no solo impacta el rendimiento durante la actividad, sino que también puede influir en los resultados alcanzados
Chica mira el reloj durante el entrenamiento.
Chica mira el reloj durante el entrenamiento. / Freepik

Actualizado hace 5 horas

La práctica de ejercicio regular es una de las claves para mantener un estilo de vida saludable. Sin embargo, el debate sobre el mejor momento del día para realizar actividad física ha sido objeto de numerosas investigaciones y discusiones.

Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard, el momento óptimo para hacer ejercicio puede no ser ni al amanecer ni al caer la noche, sino en un periodo específico del día que maximiza los beneficios tanto físicos como mentales.

La ciencia detrás del ejercicio

El ejercicio tiene múltiples beneficios para la salud, que incluyen la mejora de la condición física, el aumento de la energía y la reducción del riesgo de enfermedades crónicas. Sin embargo, el impacto de la actividad física puede variar según el momento en que se realice. Según el estudio de Harvard, la hora del día en que se hace ejercicio puede influir en la eficacia del entrenamiento y en la motivación del individuo.

Los ritmos circadianos, que son ciclos biológicos de aproximadamente 24 horas, juegan un papel crucial en la determinación de cuándo es más beneficioso hacer ejercicio. Estos ritmos afectan la temperatura corporal, la liberación de hormonas y la energía general del cuerpo. Por ejemplo, la temperatura corporal suele alcanzar su punto máximo por la tarde, lo que puede contribuir a un mejor rendimiento físico.

Joven hace ejercicios y estiramientos en el salón de casa

Joven hace ejercicios y estiramientos en el salón de casa Freepik

Ejercicio por la mañana: ventajas y desventajas

Hacer ejercicio por la mañana tiene sus beneficios. Muchos estudios sugieren que aquellos que se ejercitan en este momento del día tienden a ser más constantes y a desarrollar una rutina más sólida. El ejercicio matutino puede activar el metabolismo y proporcionar una sensación de bienestar que dura todo el día.

Sin embargo, existen desventajas. Por la mañana, los niveles de energía pueden ser más bajos debido al sueño y la rigidez muscular tras el descanso nocturno. Esto puede afectar la calidad del entrenamiento, llevando a un menor rendimiento. Además, las personas pueden estar más propensas a saltarse sus sesiones de ejercicio si tienen un día ajetreado por delante.

Chica cansada después de hacer ejercicio.

Chica cansada después de hacer ejercicio. Pexels

La tarde: el momento ideal

Según el estudio de Harvard, la tarde es el momento más adecuado para hacer ejercicio. Durante este periodo, los niveles de energía suelen ser más altos, la temperatura corporal es óptima y el cuerpo está más preparado para realizar actividades físicas intensas. Los expertos sugieren que realizar ejercicio entre las 17:00 y las 19:00 horas puede maximizar tanto el rendimiento como los beneficios generales.

Además, el ejercicio por la tarde puede ser una excelente manera de liberar el estrés acumulado durante el día. Las endorfinas liberadas durante la actividad física pueden mejorar el estado de ánimo y la claridad mental, lo que resulta en un mejor desempeño en las tareas diarias. La tarde también permite una mayor flexibilidad para la planificación del ejercicio, ya que muchas personas terminan sus responsabilidades laborales y tienen más tiempo disponible.

Hombre realiza estiramientos en los brazos mientras hace ejercicio en la playa

Hombre realiza estiramientos en los brazos mientras hace ejercicio en la playa Freepik

¿Y por la noche?

Hacer ejercicio por la noche presenta sus propias ventajas y desventajas. Por un lado, es un buen momento para quienes tienen horarios laborales exigentes y prefieren relajarse tras un día largo. Las personas que se ejercitan por la noche a menudo encuentran que les ayuda a desconectar y a reducir la ansiedad.

Sin embargo, la actividad física intensa muy cerca de la hora de dormir puede interferir con la calidad del sueño. Las endorfinas y la adrenalina liberadas durante el ejercicio pueden hacer que sea más difícil conciliar el sueño, lo que podría resultar en un ciclo de fatiga al día siguiente. Por lo tanto, si se opta por hacer ejercicio por la noche, es recomendable hacerlo al menos tres horas antes de ir a la cama.

Pareja sale a correr al aire libre por la tarde.

Pareja sale a correr al aire libre por la tarde. Freepik

¿Cómo influye la hora en los resultados?

La hora del día no solo afecta el rendimiento durante el ejercicio, sino que también puede influir en los resultados obtenidos. Estudios han demostrado que el momento en que se realiza la actividad física puede impactar en la quema de calorías y en los beneficios específicos del ejercicio.

Por ejemplo, se ha observado que hacer ejercicio por la tarde puede aumentar la capacidad del cuerpo para quemar grasas. Esto se debe a que, durante las horas de mayor actividad, el metabolismo está más acelerado, lo que puede resultar en una mayor oxidación de grasas durante y después del ejercicio. Además, la intensidad del entrenamiento tiende a ser más alta en la tarde, lo que contribuye a una mayor quema de calorías en comparación con el ejercicio matutino.

Asimismo, los beneficios del ejercicio pueden variar según la hora en que se realice. El ejercicio en la tarde ha demostrado ser más efectivo para mejorar el rendimiento muscular y la resistencia, lo que resulta en un entrenamiento más efectivo. Los niveles elevados de hormonas, como la testosterona, también son más altos por la tarde, lo que puede favorecer el crecimiento muscular y la recuperación.

2025-02-28T12:06:05+01:00
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