En la zona mixta de Mestalla compareció Nico Williams, quien finaliza contrato en junio de 2024, como Sancet. Cuestionado sobre el ruido mediático, el atacante advirtió de que “no le presto mucha atención. Yo vivo para jugar al fútbol, es por lo que me he hecho futbolista, mi sueño desde la infancia y esas son cosas que lleva mi agente. Yo estoy contento y tengo que seguir trabajando para ayudar al equipo”.
Al pedirle un mensaje a la afición por el temor a una doble pérdida de Sancet y él, el menor de los Williams, que marcó el gol del empate ante el Valencia, lanzó: “Que tengan tranquilidad, porque no se trata solo de dos jugadores. Tenemos una plantilla muy amplia con grandes jugadores y que no se preocupen. Además de ser compañeros somos amigos y entre los dos nos picamos con los goles”.
Los dos comparten representante, Félix Tainta. Hace unos días trascendió que el Aston Villa de Unai Emery había preparado un contrato de 120.000 libras (unos 135.000 euros) a la semana para Nico Williams, pero el jugador habría dicho no al ofertón del equipo de Birmingham, que estaba dispuesto a pagar su cláusula de rescisión, de 50 millones de euros.
A sus 20 años, el extremo, internacional con España y que tuvo anoche a Luis de la Fuente en el palco de Mestalla, seguro que pendiente de sus evoluciones, es uno de los jugadores de moda del Athletic. Jon Uriarte y su Junta Directiva tienen una patata caliente por resolver en el futuro de Nico. Lo mismo que con Sancet, que en una semana ha hecho cuatro goles y que podría ser una de las novedades del nuevo seleccionador en su primera lista.