"No se puede asegurar que la melliza con señales de autolesión sea la inductora”

Mientras se investigan las causas que empujaron a las mellizas de Oviedo a quitarse la vida con doce años, el profesor de Psicología Criminal y Psicología Jurídica de la UPV/EHU, César San Juan, trata de arrojar algo de luz sobre estos casos.

El caso de las mellizas de Oviedo ha impactado a la opinión pública. ¿Le alarma a usted como experto?

-Me alarma, me entristece y me preocupa. En todo caso, resulta difícil considerarse experto en un tema tan complejo e inquietante como es el suicidio, sobre todo, en menores. 

Irremediablemente recuerda al de las gemelas de Sallent. Hay expertos que descartan el efecto llamada. 

-El efecto imitación no puede explicar el fenómeno en su totalidad, pero me parecería muy atrevido descartarlo en este caso. Hay evidencias de lo que se conoce como 'efecto Werther', que hace referencia al aumento de suicidios tras la aparición de un caso en los medios de comunicación. No se trata de ocultar las noticias de suicidios, sino de tomar una serie de precauciones en su tratamiento, como evitar dar excesivos detalles de las motivaciones o imágenes del suceso. Resulta imposible no recordar a las gemelas de Sallent y se desconoce el impacto que pudo provocar esta noticia en las mellizas de Oviedo. 

Parece descartarse la hipótesis del ‘bullying’, se dice que eran buenas estudiantes y estaban bien integradas. ¿Qué podría haber motivado este trágico desenlace? 

-Se trata de un fenómeno complejo que, en el caso de España, empieza a arrojar datos muy preocupantes, sobre todo, después de la pandemia. La emergencia sanitaria y el confinamiento han propiciado un aumento de los factores de riesgo de conductas suicidas, tales como el aislamiento, el abuso de los dispositivos tecnológicos, redes sociales, problemas de salud mental, etc. En cada caso concreto, como este, resultaría muy adecuado realizar una autopsia psicológica, que consiste en la evaluación del perfil psicológico de la persona que se ha quitado la vida con el fin de comprender su estado mental y los motivos que le han llevado a dar ese paso. En este sentido, son importantes los datos aportados por informantes clave, familiares, profesores, amistades, y examinar las evidencias tangibles, como objetos personales, diarios, notas, mensajes en redes sociales, historiales de búsqueda en internet, etc.

Ha trascendido que una de las mellizas tenía marcas de autolesiones, que había dibujos relativos al suicidio... ¿Siempre hay señales? 

-No creo que aporte nada transmitir la idea de que siempre hay señales con las que podemos prever las intenciones suicidas de una persona porque lo único que va a generar es un insoportable e innecesario sentimiento de culpa en los familiares. Se van a atormentar con la idea de que no estuvieron suficientemente atentos a las señales y esto sería injusto porque no siempre las hay. Al menos, lo suficientemente evidentes. Todos tenemos una esfera íntima de nuestra personalidad de difícil acceso para el resto del mundo y esta peculiaridad no es diferente para las personas que pueden estar albergando la idea de quitarse la vida. En el caso de los adolescentes es importante, en todo caso, prestar atención a síntomas tales como cambios de humor, aislamiento social, falta de interés por las cosas, abuso de sustancias, una mala higiene del sueño o, como el caso que nos ocupa, conductas autolesivas 

Un memorial dispuesto en recuerdo de las mellizas en el portal de su vivienda, en Oviedo. J.L. Cereijido

¿Pueden menores de tan corta edad ocultar sus intenciones a su entorno más cercano? Las familias quedan devastadas por lo inesperado. 

-La adolescencia no se caracteriza precisamente por ser una etapa en la que fluya armoniosamente la comunicación entre padres e hijos. La búsqueda de la propia identidad, la necesidad de ser dueños de su esfera de intimidad y un cierto sentimiento de incomprensión por parte de los adultos propicia que los adolescentes oculten sus intenciones, de todo tipo, a su entorno más cercano. También si se trata de intenciones suicidas. El resultado no puede ser otro que el que mencionas, una familia devastada.

Se investiga si una de ellas pudo inducir a la otra. ¿Lo ve posible?

-Considerando el vínculo emocional que normalmente tienen los hermanos mellizos, como parece ser este caso, y atendiendo al hecho de que las autolesiones y las referencias suicidas en una libreta pertenecían a una de las hermanas, puede ser muy posible.

¿En los casos de mellizos o gemelos siempre hay una personalidad dominante sobre otra? 

-La relación entre mellizos o gemelos es todo un campo de estudio en Psicología y lo cierto es que no siempre es fácil gestionar esa relación. Ni para los propios hermanos ni para los padres. El rol de dominancia y sumisión puede ser estable o intercambiarse con el tiempo, pero, en todo caso, tiende a equilibrarse en la edad adulta. Sí hay estudios que apuntan que los gemelos más sumisos pueden sufrir más tendencia a la depresión y, por tanto, a la ideación suicida. Así que tampoco se puede asegurar que la melliza a la que se le han encontrado las señales de autolesión sea la inductora. También ha podido ser al revés. Por eso sería muy pertinente la autopsia psicológica a la que aludía. 

¿Puede existir en este tipo de hermanos una relación de unión tal que les aboque a actuar juntos pese a poner en riesgo su salud o su vida? 

-Así es. Cuando me he referido a lo complicado que es en ocasiones para unos hermanos gemelos gestionar su relación es porque, entre otras cosas, cada uno siente la necesidad ineludible de hacer lo que hace el otro. 

Las dos menores de Oviedo eran rusas, las de Sallent argentinas... ¿Ve este dato significativo? ¿Tienen un hándicap estos menores que puede que la sociedad no tenga en cuenta? 

-La marginalidad, padecer situaciones de vulnerabilidad económica o social, las dificultades de acceder a los servicios de salud mental…, en fin, la pobreza, todo esto tiene un mayor poder explicativo que ser ruso, argentino, catalán o asturiano. Claro que, si encontramos que estos problemas se dan mayoritariamente en población migrante, estamos ante una escala del problema diferente.