Irati es mucho más que un bonito nombre que al parecer significa un campo de helechos. También va mucho más allá de la galardonada película del director alavés Paul Urkijo de la que hablaremos más adelante. Irati simboliza la naturaleza en todo su esplendor, una Selva llena de vegetación, un bosque de hayas y abetos, de los más grandes de Europa (el segundo para ser más exactos), que encontraremos lleno de secretos por descubrir en pleno Pirineo.
Hacia allí nos encaminamos en esta ocasión, si el tiempo acompaña, para recorrer sus sendas a pie o en bicicleta y descubrir de esta manera todo lo que nos aguarda al adentrarnos en este reclamo turístico lleno de vida que, para 2025, conoceremos si la Unesco le otorga la catalogación de Reserva de la Biosfera (algo que las juntas generales de Salazar y Aezkoa han solicitado recientemente).
Aquí, la mitología cobra, además, gran importancia. Y es que se dice que entre sus hayas y abetos (antes gran parte de los árboles fueron robles) podemos encontrarnos a Basajaun, el gentil de la mitología vasca que -se cree- pululaba por estos bosques. También podemos ver, si estamos de suerte, a las lamias que se peinan y se bañan en el río Irati, pero solo si ellas quieren dejarse ver, claro.
Sea como sea, una de las mejores épocas para recorrerla es el otoño, y son distintas las rutas que podemos escoger para recorrer. Pero en esta ocasión nos detendremos en algunos puntos muy interesantes para conocer su historia.
La cueva de Arpea
Empezamos parándonos en un punto entre los valles de Aezkoa y Garazi, donde descubriremos la cueva de Arpea, un lugar que parece sacado de otro mundo, una cavidad en la roca que no dejará indiferente a nadie. Para llegar hasta ella, podemos salir desde uno de los lugares más llenos de historia de esta Selva.
Efectivamente, hablamos de la fábrica de armas de Orbaizeta, cuyas obras de reforma en el antiguo palacio de la fábrica concluyeron el pasado año. Reabierto ahora con el nombre de Aezkoako Kultur Ola, este espacio expositivo alberga en su interior la esencia del territorio y de sus gentes.
Pero, ¿cuál es la historia de esta factoría? En funcionamiento durante un siglo desde finales del XVIII hasta finales del XIX, se dedicó a producir armas, munición y cañones para el ejército español, pero tal y como recuerdan desde el consistorio de Orbaizeta, su historia se remonta varios años atrás. Y es que antes de fábrica de armas, fue una ferrería, y tanto esta como sus montes comunales fueron cedidos a la Corona española a cambio de la construcción de la fábrica, que terminaría con esta en ruinas años después.
Ahora mismo son muchos los turistas y visitantes que se acercan a contemplar los vestigios de lo que fue un día.
Mirador de Zamariain
Seguimos con nuestra ruta, para poner rumbo a continuación a otro de los grandes reclamos de la Selva de Irati, el conocido como Mirador de Zamariain, del que sin duda hemos visto cientos de fotos en redes sociales, pues parece que estamos suspendidos en el aire. Se trata de una roca que sobresale y desde la que podemos contemplar la Selva de Irati en todo su esplendor. Es una ruta sin mucha dificultad que nos llevará cerca de Garaioa y que merece la pena con tal de disfrutar de este mirador natural.
Como pueden observar, son muchas las experiencias que podemos vivir en la Selva de Irati, donde la naturaleza se entremezcla con la mano del hombre, la arquitectura y una de nuestras últimas visitas, el agua. Y es que terminamos esta aventura acercándonos al embalse de Irabia, que lo encontraremos ya totalmente integrado en el paisaje que conforma la Selva de Irati. Esta fuente de agua, enmarcada dentro de la demarcación hidrográfica del Ebro, está rodeada de hermosas hayas. Allí, rodeados de naturaleza y de agua, terminamos nuestro recorrido.
IRATI, TERRITORIO DE PELÍCULA
No podemos acercarnos a la Selva de Irati sin que se nos venga a la mente la reciente película del alavés Paul Urkijo de mismo nombre, Irati. Y es que, si nos acercamos a este enclave, descubriremos que es una de las localizaciones escogidas por el director para rodar este largometraje donde la historia se entremezcla con las leyendas del territorio. Junto a esta mágica selva, otras de las localizaciones escogidas son el castillo de Loarre, en Huesca; La Leze, en Ilarduya (Asparrena); así como otros lugares de Araba, Bizkaia y Navarra.
A TENER EN CUENTA
La Selva de Irati es todo un reclamo turístico, que cada año recibe la visita de miles de aventureros que se acercan para recorrerla en su totalidad, o parte de ella. Por la zona encontraremos diferentes sitios donde alojarnos si pensamos pasar más de un día. Además, es aconsejable ir ataviados con ropa cómoda y abrigada -especialmente ahora en invierno-, calzado adecuado y algo de comida y agua si nuestra intención es pasar un buen rato en la zona.
Eso sí, mantener esta Selva en todo su esplendor es obra de todos. Por eso, si comemos o bebemos algo durante el recorrido, es aconsejable llevarnos todos los residuos con nosotros, y no dejarlos en cualquier sitio. Y, ya que estamos por la zona, otras cosas que podemos hacer en territorio navarro son visitar Zugarramurdi, Olite o el nacedero del Urederra. También podemos aprovechar la ocasión para descubrir el valle del Baztán, ese que inspiró la aclamada trilogía de Dolores Redondo.