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“Nuestro objetivo es la cobertura de salud para toda la población, viva donde viva, fortaleciendo la atención primaria pública”

De izquierda a derecha, Mirentxu Cebrián, Alfredo Amilibia, Natalia Herce, Dori Iriarte y Diego de Paz, cinco de los miembros de Medicus Mundi en Navarra.

Medio siglo no lo celebra cualquier asociación. Medicus Mundi conmemora en Navarra 50 años de existencia defendiendo el derecho a la salud. Hemos reunido a seis de sus miembros: Dori Iriarte, su presidenta desde 2015; Jesús Chocarro, técnico de Educación desde 1995; Alfredo Amilibia, actual tesorero y extrabajador; Diego de Paz, director; Mirentxu Cebrián, secretaria de la junta y Natalia Herce, coordinadora. Todos ellos, siguen la estela del fundador de la asociación en Navarra, Miguel Ángel Argal, “un luchador por mejorar las condiciones de vida” y un “visionario”. El viernes, Medicus Mundi acudió al Parlamento foral a dar cuenta de su aniversario, como “casa de todos los navarros”.

Dori Iriarte: Es un momento bonito a la vez que clave como asociación. Este aniversario nos está sirviendo para revisar el trabajo hecho. Nos acordamos mucho estos días de nuestro fundador, Miguel Ángel Argal, y de cómo empezó esta asociación en Ruanda con un proyecto en Nemba, que hoy día sigue siendo referencia. Hemos trabajado en 38 países y llegado a 17 millones de personas. Esta trayectoria nos sirve para ver en qué momento estamos y qué retos queremos asumir a futuro. Debe ser un momento no solo de recordar y agradecer, sino también de sacar aprendizajes para nuestro trabajo futuro. Porque es complicado, dependemos mucho de apoyos.

Natalia Herce: Hemos identificado retos que tienen que ver con la salud, con la cooperación y con la organización como tal. En salud, el principal es conseguir que se garantice la cobertura sanitaria universal para toda la población, viva donde viva, sobre todo fortaleciendo los sistemas públicos de salud, en especial su primer nivel, la atención primaria. En cooperación , entre lo más importante está que se refuerce la Ayuda al Desarrollo, se tenga presente la Agenda 2030 y en Navarra se siga apostando por una política de cooperación potente como hasta ahora. A nivel interno, el principal reto es fortalecernos, con nuevas personas socias, voluntarias, donantes, legatarias, empresas... y consigamos que toda la gente que quiera contribuir a la defensa del derecho a la salud pueda hacerlo a través nuestra. En el acto del viernes en el Parlamento dejamos clara la necesidad de compromiso del Gobierno de Navarra, del propio Parlamento, de los ayuntamientos y también de las empresas, de apostar por la cooperación como tema de justicia, no de caridad. Navarra ha sido en general una tierra puntera, salvo un bajón gordo que hubo con un Gobierno de UPN, pero ahora está remontando y animamos a que el Gobierno que entre el año que viene por lo menos mantenga la senda de subida que ha empezado el actual.

Este aniversario nos está sirviendo para revisar el trabajo hecho y ver qué retos queremos asumir

Dori Iriarte - Presidenta de Medicus Mundi Navarra Aragón Madrid

Diego de Paz: Aparte de fondos, que son imprescindibles, porque sin fondos no hay política pública de ningún tipo, también pedimos que vaya evolucionando el tipo de cooperación que estamos haciendo, precisamente con los mimbres que ya tenemos. Navarra siempre ha tenido una especificidad de cooperación en salud. El 25% del presupuesto de cooperación, históricamente, se dedica a salud, y además con un sesgo muy marcado a salud básica. Es el momento de ir evolucionando el modelo de cooperación de Navarra.

Alfredo Amilibia: Otro reto, como Medicus Mundi y en el conjunto de las ONGD, es volver a generar un mayor espacio dentro de la sociedad civil, porque somos organizaciones que necesitamos de muchas personas que dinamicen y empujen. Tengo la sensación de que ha habido años en los cuales ha soplado el viento a favor. Éramos noticia en prensa. La gente y los medios de comunicación tenían un interés progresivo, y creo que llevamos una temporada en que estamos pasando más inadvertidos. La gente se moviliza o tiene interés, esencialmente, cuando hay catástrofes humanitarias, conflictos bélicos... también hay quien se moviliza mucho con las necesidades locales, y no sé si hay un cierto cansancio social ante el sector de la cooperación. Como diciendo... trabajan bien, harán muchas cosas, pero todo sigue más o menos parecido.

Creámonos de verdad que nadie puede quedarse atrás, el lema de moda de la Agenda 2030

Natalia Herce - Coordinadora

Diego de Paz: La complejidad de los problemas de salud y el nivel de especialización que se nos pide se han ido sumando como capas de una cebolla. No es que tengamos que continuar haciendo lo mismo de siempre, que sigue siendo necesario, sino que también tenemos que abordar cosas nuevas y de forma distinta. Manteniendo la profesionalidad y la calidad. Las ONGD de hoy tienen que ser muy adaptables y flexibles, sin perder el foco, la coherencia y los valores fundamentales.

Jesús Chocarro: La educación y la comunicación para el desarrollo han sido seña de identidad nuestra por una financiación que permitía trabajar a largo plazo, cosa que ahora es más difícil, y por un equipo en el que nos implicamos hasta las cejas. Para mí, una de las cosas interesantes en el trabajo realizado es conseguir también implicar a la población en las acciones de sensibilización, donde el protagonismo de esas acciones tiene que ver con esta.

Las ONGD tienen que ser muy adaptables, sin perder el foco, la coherencia y los valores

Diego de Paz - Director

Mirentxu Cebrián: Yo soy sanitaria. Cuando estaba estudiando existía esa idea a de ir a África o a América Latina con un concepto caritativo o asistencial, no de intercambio de saberes. El tipo de voluntariado es totalmente diferente al de antes.

Natalia Herce: Por desgracia sigue habiendo millones y millones de personas que no pueden disfrutar de condiciones de vida dignas ni de un sistema público de salud de calidad. Además estamos empezando a ver que eso también pasa en nuestro entorno. Navarra igual es una comunidad donde la sanidad siempre ha sido potente, pero en comunidades por ejemplo como Madrid, que también es ahora nuestro territorio de intervención, el desmantelamiento que está sufriendo la salud pública, la atención primaria, es terrible. Y todo lo que ha pasado aquí durante años en España, población que no tenía acceso al sistema sanitario por no tener regularizada su situación legal. En eso que antes pasaba lejos, ahora también vemos que hay personas que aquí se están quedando atrás, contra el lema de la Agenda 2030, que se está poniendo muy de moda. Creámonoslo de verdad; tenemos que seguir tejiendo redes para conseguir que todo el mundo tenga condiciones de vida dignas.

Un reto en el conjunto de las ONGD es volver a generar mayor espacio en la sociedad civil

Alfredo Amilibia - Tesorero

–Diego de Paz: Es muy importante trabajar con los jóvenes. También hay que trabajar en incidencia, no solo con los ministerios de Salud, también los de Economía o Agricultura. No te vale solo con tener un sistema sanitario potente, tienes que abordar otros aspectos para tener una población más sana. Todo eso lo trabajamos, no solo en los países con los que colaboramos, sino también aquí, en España. Hemos aprendido que necesitamos demostrar aquí en Navarra que el sistema de salud, público y de calidad, es sostenible y viable.

Jesús Chocarro: Otro avance importante es el trabajo en red. Es necesario coordinarse con la gente que está luchando por los mismos objetivos aunque sea desde diferentes lugares.

Dori Iriarte: Creo que hay que trascender ese discursos del Sur y el Norte. Hablamos de defensa de la salud universal, en cualquier país y población. La era digital nos ha hecho ponernos las pilas, desde 2015 somos Medicus Mundi Navarra, Aragón, Madrid.

Alfredo Amilibia: El origen del cambio es que Medicus Mundi estaba estructurada en 17 asociaciones en España y con el ciclo de la crisis de 2008 a 2013 teníamos algunas muy frágiles, y corríamos el riesgo de que desapareciesen. No era nuestro caso, que era la que tenía más peso. Navarra se fusionó con Madrid y Aragón por más afinidad entre las personas y equipos. Se trataba de aunar recursos y esfuerzos para fortalecernos.

Natalia Herce: La era digital ha facilitado el vínculo con personas de otros países, de Guatemala, de Ruanda, de Senegal... Antes nos parecía imposible tener una reunión con ellas, y ahora eso se ha vuelto ordinario, y ha sido una ventaja. Nos ha abierto la puerta a una línea de cooperación técnica muy interesante. Ahora mismo tenemos un equipo de 19 personas sanitarias de Navarra, médicas, médicos y enfermeras, que están acompañando un proyecto de formación en Guatemala . Y eso se ha podido hacer básicamente por medio de reuniones on line. Otra ventaja es la facilidad de llegar con nuestros mensajes a gente a la que antes no llegábamos, y controlando nosotros el mensaje.

Mirentxu Cebrián: Por otro lado, una cosa es la teoría, cuando vas al terreno y lo ves en vivo y en directo, y hablas con la gente de allá, te fideliza muchísimo más y te sientes más parte de ese mundo y de esa colaboración. Yo he estado en Mali, en Bolivia y en Perú, por distintos motivos y con distintas finalidades.

Alfredo Amilibia: Hicimos un viaje organizado en el que llevamos al entonces presidente Miguel Sanz y al consejero de Bienestar Social, Calixto Ayesa. Después hemos acompañado en otros viajes institucionales, pero como miembros de la Coordinadora de ONGD.

Jesús Chocarro: Es mucho más efectivo que la gente , vea, toque y sienta las realidades. No puedes comparar dos horas contándolo aquí, que dos horas vividas allá. Es totalmente distinto. La línea de sensibilización de viajes abiertos a Ruanda ha funcionado muy bien. También ha habido viajes desde el Sur a aquí, de políticos municipales. Poder generar vínculos entre Navarra y otros lugares, o viceversa, es todavía un reto todavía pendiente. No solo viajar allá para sensibilizarse. Crear vínculos entre jóvenes, entre profesionales sanitarios, que permitan conocernos, asesorarnos y hacer cosas juntos. Eso todavía está a mitad de camino.

Natalia Herce: En esos viajes abiertos a la gente, nos interesaba ofrecer la oportunidad de conocer un país difícil de acceder por tus propios medios, con todo su bagaje históricos, las miserias que han pasado. Quienes viajaban pasaban por tres sesiones de formación como requisito. Con Ramón Arozarena como nuestro historiador de cabecera, el objetivo es que la gente llegara allí pudiera entender mejor lo que iba a vivir. No solo nuestro trabajo, sino la vida en Ruanda. En 2020 fue el último viaje, los paramos por la pandemia, y ahora estamos a la espera de ver si lo retomamos en 2023 o 2024. ¿El genocidio en 1994? Para la asociación fue uno de los hitos de su historia. Supuso intervenir en una emergencia, que no es nuestro ámbito natural de trabajo. Nuestros proyectos son a largo plazo, y eso fue, de repente, la catástrofe más grande en el mundo después de la Guerra Mundial. Había que reaccionar, se consiguió mucho dinero, se envió gente, equipamientos médicos...

Diego de Paz: Después de esta pandemia, en el ámbito más específico de la salud, hemos visto que estamos todos en el mismo barco y tenemos que apoyarnos los unos a los otros vivamos donde vivamos. Estamos hablando de un único sistema de salud en todo el mundo, una salud global, concepto que ya tenemos que empezar a manejar todos.

La educación y la comunicación han sido seña de identidad, con un equipo implicado hasta las cejas

Jesús Chocarro - Técnico de Educación

Natalia Herce: Llevamos veinte años participando en el consorcio ‘África Imprescindible’, que promueve una visión positiva sobre África, su riqueza y su cultura. Este jueves se inauguró una exposición muy chula en la Ciudadela. Javier Pagola, durante años nuestro responsable de comunicación, hablaba de educomunicación. Cómo usar la comunicación para contar otras realidades y acercar la cultura de África o Latinoamérica y toda su riqueza a la población de aquí. Ahora es más fácil.

Jesús Chocarro: Otro nombre para recordar es el de Esperanza Soroa. Nos hizo pensar en grande. ‘En busca del Sur’ fue una exposición que era la bomba, y para eso no solo hay que tener dinero, hay que atreverse. –Mirentxu Cebrián: ¿Cuál es nuestra relación con el colectivo sanitario? Es uno de nuestros públicos diana. Somos una organización de salud y hay que contar con los sanitarios, su voluntariado y sus aportes. También con otros colectivos, pero un grupo prioritario tendría que ser el sanitario.

Natalia Herce: De hecho, el Colegio de Médicos fue la primera casa de Medicus Mundi. En los últimos veinte años con el colectivo médico no hemos tenido especial vinculación. En parte por intentar que no nos asociaran solo con médicos. Nuestro objetivo es la salud, y esta no es solo atención sanitaria, sino que engloba muchos factores, que es lo que la Agenda 2030 ha puesto encima de la mesa. Queremos pedir a Osasunbidea, a través del Consejo Navarro de Cooperación, que todo ese bagaje y conocimiento que hay en la organización del sistema público de salud de Navarra, que nosotros lo podamos canalizar a a través de proyectos de cooperación.

Cuando vas al terreno, te fideliza muchísimo más y te sientes más parte de ese mundo

Mirentxu Cebrián - Secretaria de la Junta

Diego de Paz: Es un viejo deseo nuestro y también de Osasunbidea que esos profesionales se impliquen más en cooperación. Otro tema es el feminismo. Estamos interpelados para incorporar los postulados feministas en nuestro trabajo, aquí y allí, para trabajar con colectivos feministas, funcionar y mirar de una forma distinta. Pero nos cuesta mucho a todas las organizaciones dar ese salto. Porque estamos muy cómodos, y el enfoque de género lo tenemos más que trabajado e interiorizado, pero esto es dar un salto un poco más allá. Además, tenemos un cierto miedo a la malinterpretación, a meternos en un jardín del que pueda ser complicado salir, y volver en contra a personas que no puedan entender bien que cuando hablamos de feminismo no lo hacemos contra los hombres, sino de algo completamente distinta.

07/11/2022