El segundo entrenamiento de la pretemporada del Athletic con las puertas abiertas al público volvió a congregar a un elevado número de aficionados en Lezama. Hasta 1.500 seguidores, la mayoría niños y niñas acompañados por sus padres en una calurosa mañana de sábado, se desplazaron hasta la factoría bilbaina para ver en acción a los leones. Esta vez, al contrario de lo que sucedió en la tarde del jueves no hubo que ampliar el aforo disponible al advertir el viernes el club que, por motivos de seguridad, el acceso estaría únicamente abierto "hasta completar aforo". Así fue. Lezama volvió a llenarse en una sesión que alcanzó los setenta minutos de duración y en la que los rojiblancos realizaron ejercicios con y sin balón sin que los dos guardametas, Alex Padilla y Oier Gastesi, entraran en acción junto al resto de sus compañeros.
Ambos se ejercitaron en un campo anexo al principal de Lezama, en el que volvieron a romper a sudar los 29 jugadores que se mantienen a disposición de Ernesto Valverde. Entre ellos volvió a asomar, durante aproximadamente 45 minutos, Imanol García de Albéniz, quien está previsto que reciba el alta médica a la vuelta del equipo de México el próximo día 21 tras recuperarse de la rotura del tendón de Aquiles derecho que le obligó a pasar por el quirófano en febrero durante su cesión al Eibar. Los dos hombres que siguen de baja y sin poder entrenar con el grueso de la plantilla son Yeray Álvarez y Yuri Berchiche, quienes trabajaron en el interior de las instalaciones. Mikel Vesga, por su parte, hizo carrera continúa en un tramo de la sesión.
SUSTO EN LA GRADA
El entrenamiento, que concluyó con una sesión de firmas y autógrafos antes de que los jugadores continuaran con el trabajo en el interior, arrancó con susto en la grada. Un hombre de avanzada edad sufrió un golpe de calor y fue atendido en el lugar por Josean Lekue, jefe de los servicios médicos del Athletic. Después, una vez repuesto, fue acompañado hasta la zona superior del edificio del primer equipo, desde la cual, a la sombra, presenció el entrenamiento. Tuvo, además, la oportunidad de saludar y dialogar con José Ángel Iribar, quien se acercó hasta su posición.