¿Sabías que quitarte las comidas menos sanas no mejora tu alimentación?

Comer bien es algo a lo que aspiramos todos, aunque no siempre lo conseguimos. El elevado precio de los alimentos, la falta de tiempo para preparar recetas saludables e, incluso, la escasa información sobre las propiedades de algunos nutrientes nos dificultan cuidar de nuestra salud. De ello hemos hablado en Onda Vasca con Txema Gutiérrez con la dietista y nutricionista Matxalen Cenitagoya, que ha visitado Onda Vasca para ayudarnos a cambiar nuestras costumbres alimenticias.

Por ejemplo, cuando estamos a dieta, existe cierta tendencia a eliminar algunas comidas de nuestra rutina alimentaria. Esto resulta, en palabras de la experta, una mala práctica: "Hay que comer de todo, porque la clave no es expulsar ciertos productos, sino ajustar la frecuencia de estos". En este sentido, Cenitagoya nos ha explicado que lo que deberíamos comer más a menudo son las carnes magras, lácteos sin azúcar, legumbres, cereales integrales, huevos, pescado, fruta y verdura. De hecho, la nutricionista sugiere que no es malo comer pan (integral), legumbres y jamón natural. Sin embargo, se debería moderar la ingesta de postres más dulces, frituras, embutidos, salsas y harinas refinadas, que son las más recurridas por la falta de tiempo para cocinar. 

Por otro lado, el desayuno, a diferencia de lo que estamos acostumbrados a escuchar, no debe ser la comida más importante del día, sino que tiene que estar igual de equilibrada que un almuerzo. Por ello, lo ideal, según Zenitagoia, es comenzar el día con algo de hidratos de carbono (pan, cereales no azucarados...), proteína (jamón, queso fresco...), fruta y lácteos. Cuanto más variado, mejor.