Una cosa está clara y es la importancia que le damos a nuestra vestimenta en cualquier época del año. Todos sabemos que no podemos ir en chándal a una boda ni en tacones a un gimnasio. Que no podemos ponernos ropa informal en eventos importantes ni vestirnos de gala para ir a trabajar. Y, sobre todo, que no podemos ponernos un abrigo de plumas en verano ni un pantalón corto en pleno invierno.
Aparte de las influencias sociales, son muchos los factores que influyen en la elección de nuestra ropa: el estado de ánimo, el tipo de evento, el horario, la comodidad y, el más importante, la temperatura. ¿Quién no se ha asomado por la ventana o ha mirado en páginas web el tiempo para saber qué ponerse?
Vestirse bien en invierno es mucho más fácil. Ropa de abrigo, guantes, bufanda y botas son algunos de los imprescindibles para no pasar frío en esta época. La complicación llega de la mano de las altas temperaturas y el buen tiempo.
En este caso, el verano no es un gran aliado de la moda. Científicamente, a partir de los 27 grados centígrados ya se considera que hace calor y es entonces cuando las mangas largas, los pantalones largos, los jerséis y los zapatos cerrados empiezan a sobrar. Ya sabemos que los bikinis y bañadores se llevan muy bien con la playa y la piscina pero, en caso de que tengas que quedarte trabajando o en la ciudad, esta no será una buena opción.
Pero tranquil@s, para todo hay una solución. Determinadas prendas, tipos de telas y colores son los que nos van a ayudar a ir fresquitos y con estilo en estos meses en los que solo apetece tirarse en el sofá y poner el aire acondicionado a tope.
¿Qué tipo de ropa es mejor para el calor?
Aparte de la temperatura, cuando creamos un look también tenemos que tener en cuenta las tendencias del momento o nuestros propios gustos. Pero en verano esta tarea se nos complica un poco.
¿Crees que los tirantes son tu única opción? ¡Pues no! Aquí te dejo 8 ideas de prendas con las que evitarás pasar calor en esta época del año.
Vestidos fluidos y de volantes
Un esencial que nunca pasa de moda son los vestidos largos o cortos vaporosos y de volantes que aportarán frescura a tu look. Con distintos estampados o con colores neutros serán una de tus mejores opciones.
Una chica con un vestido de volantes en la playa.
Pantalones y faldas cortas
Tanto si los combinas con una camiseta y unas bambas para darte un toque informal como si los combinas con un chaleco o camisa para verte más formal, tu colección de pantalones y faldas cortas será fundamental en tu armario.
Una chica con una falda corta.
Tank tops
Una prenda muy versátil y cómoda, ¡Combínalos con lo que quieras!
Top de tirantes rosa.
Camisas oversize
Para más opciones, también podemos contar con las camisas oversize, una prenda más holgada y fresca muy ponible para días calurosos de oficina.
Una chica en la playa con una camisa oversize.
Pantalones de lino
En el caso de que prefieras prendas largas, los pantalones de lino serán tu mejor alternativa.
Una chica con un pantalón de lino.
Ropa de crochet
Tanto para ir a la playa como para dar un paseo, ¡Las prendas de ganchillo son súper originales!
Top de crochet.
Bailarinas
También conocidas como manoletinas, el calzado perfecto para verano si no quieres pasar calor en la calle ni quedarte fría con el aire acondicionado de la oficina.
Unas bailarinas.
¿Qué telas no dan calor?
La elección de las prendas de ropa está estrechamente relacionada con el tipo de telas de dichas prendas. En invierno optamos por telas abrigaditas y que nos aporten calor, pero en verano los tejidos esenciales serán: el lino, la seda y el algodón.
¿Cuáles son los colores que repelen el calor?
Desde siempre, uno de los consejos más frecuentes para no pasar calor al aire libre es evitar la ropa de colores oscuros, ya que absorben la luz y la convierten en calor. Pero, lo que muy poca gente tiene en cuenta es que el calor no solo proviene del sol. También lo hace del cuerpo de cada persona. Es por esto que, en las condiciones adecuadas, con un poco de viento y ropa holgada, la ropa oscura producirá el llamado efecto chimenea, expulsando nuestro calor y manteniéndonos más frescos.