En estos días de tanto calor necesitamos productos frescos que nos ayuden a combatir las altas temperaturas, como pueden ser un café con hielos o un helado. Para este tipo de ocasiones es imprescindible tener el congelador abastecido y las cubiteras de hielo listas.
Pero estos moldes de silicona tan prácticos que forman cubitos de hielo rápidamente pueden cumplir otras funciones de lo más curiosas que nos faciliten el día a día. Además de resultar útiles para el hogar, también podemos usarlos para congelar otros productos.
Con estas nueve alternativas podrás darles un segundo uso a las cubiteras de hielo y aprovecharlas de la mejor manera:
1. Tornillos y piezas pequeñas. Las reformas pueden convertirse en proyectos largos y tediosos. Para tener tus herramientas y piezas de bricolaje en perfecto orden puedes utilizar las cubiteras para organizar los distintos tipos de tornillos y demás piezas pequeñas. También puedes utilizarlas para guardar objetos como clips o chinchetas.
2. Objetos de belleza. Siguiendo con las piezas pequeñas, las cubiteras sirven para organizar los cajones del baño y guardar objetos fáciles de perder como gomas, horquillas o pinzas. Además, también podremos guardar pequeños botes de maquillaje o, incluso, collares y pendientes para tenerlos a la vista.
3. Mezclador de pintura. Si estás hecho un artista, las cubiteras de hielo son perfectas para mezclar diferentes colores y obtener el tono que necesitas. Además, estos moldes suelen estar hechos de silicona, por lo que son fáciles de lavar y cuentan con varios huecos para hacer múltiples combinaciones.
4. Salsas. Con el objetivo de aprovechar los alimentos, en las cubiteras de hielo podemos guardar diferentes salsas que nos sobren de nuestros platos, como un sofrito. Así, además de conservar la salsa durante más tiempo, podremos añadirla de forma rápida a otras recetas.
5. Polos de frutas. Los helados son uno de los alimentos estrella del verano. Para hacer nuestros propios polos caseros y saludables podemos utilizar la cubitera. Cogemos las frutas que más nos gusten, las trituramos e introducimos la mezcla en todos los moldes. Podemos hacer infinitas combinaciones y puede ser una actividad para realizar en familia.
6. Café. La manera más eficaz para disfrutar de un buen café fresco en verano es añadiéndole un par de hielos. Aunque de esta manera nos arriesgamos a que los hielos se derritan y terminen aguando la bebida. Para que eso no ocurra y el café conserve su intenso sabor, podemos hacer cubitos de café para acompañar la bebida.
7. Zumo de frutas. Si no tomamos cafeína pero queremos disfrutar de una bebida fresca, podemos repetir el mismo paso anterior y congelar el zumo de un limón, una naranja o cualquier fruta de temporada. Además, el zumo de limón es un ingrediente que se usa en varias recetas, por lo que de esta manera siempre lo tendremos a mano.
8. Bombones. Para sorprender a tu familia o amigos con un postre simple pero delicioso únicamente necesitarás: fresas, chocolate y una cubitera. Derretimos el chocolate al baño maría o en el microondas y pintamos cada molde con el chocolate. Cuando todavía esté caliente, introducimos una fresa entera en cada hueco y rellenamos con un poco más de chocolate derretido. Metemos al congelador y ya tenemos listos estos bombones de fresas y chocolate sencillos y ricos.