Oier Sanjurjo: un legado para siempre

353 partidos defendiendo la camiseta de Osasuna da lugar a compartir vestuario con un sinfín de compañeros y entrenadores. Varios de ellos han querido desgranar la figura de Oier Sanjurjo, una vez el capitán rojillo anunciaba en el día de ayer que dejaba el club a final de temporada.

Una de las figuras históricas de Osasuna, Enrique Martín Monreal, destaca del estellés que "es una persona con unos valores muy claros y potentes, y siempre ha estado al servicio del equipo y los compañeros". "Diría que heredó los genes de Osasuna de Patxi Puñal y Cruchaga", explica el exentrenador y exjugador rojillo. "Ha sido una persona con un sentimiento muy profundo de osasunismo y ha facilitado a muchos compañeros su progresión dentro y fuera del campo", subraya.

La primera vez que Enrique Martín entrenó al estellés fue en la caótica temporada 2014-2015 en Segunda, con la salvación en Sabadell. Ese paso por el banquillo, que duró hasta noviembre de 2017, le sirvió al de Campanas para comprobar por qué Oier siempre ha jugado con todos los entrenadores. "Oier te enganchaba con su disposición en los entrenamientos y en los partidos. Ha sido un jugador que cualquier entrenador le gusta tener porque allá donde lo ponga le va a rendir no solo al equipo, sino en el aspecto emocional también era súper importante", menciona.

Martín remarca la polivalencia del jugador de 35 años. "Como se lo comenté un día, ha sido un privilegiado porque creo que en el fútbol español no hay cinco jugadores en Primera División que puedan jugar en todos los puestos como ha jugado él menos de portero: lateral derecho e izquierdo, central derecho e izquierdo, pivote, mediapunta por la derecha e izquierda", analiza.

Así como Oier heredó de Puñal y Cruchaga, Enrique Martín no tiene dudas en quién va a asumir ese rol en la plantilla. Para él, "David García es, si se mantiene en el equipo, el heredero de esos valores de cara a ese núcleo duro que Osasuna siempre debe mantener en su vestuario". Apunta que en la primera campaña del central de Ibero en el primer equipo (2014-2015), "Oier era de los jugadores con experiencia de los que tiraban del carro como Miguel Flaño, Nino, Rober (Torres). David (García) también empezaba a aprender de él lo que Oier había aprendido de Cruchaga y Puñal".

"Me acuerdo en aquel momento que los capitanes eran Miguel Flaño, Nino, Oier y Roberto. El que más liderazgo tenía era Flaño. Incluí a David en ese cuarteto para que fuera mamando de todos ellos", rememora, antes de sentenciar sobre David García que "ahora llega el momento de que tome el mando. Ahí va a quedar reflejado los valores del club y el equipo. Sería muy importante para mantener ese núcleo duro que siempre ha existido y debe seguir existiendo para guardar esa consistencia".

Un excompañero como Damià Abella, que coincidió con el estellés cuatro temporadas, califica al rojillo como "un guerrero, que creo que su manera de jugar responde a cómo es él: un tío con ímpetu, con las ideas claras en la vida y un tío muy noble. Y eso se trataba en el campo. Más allá de que juegue bien o mal, de que esté acertado o no, va con su manera de pensar hacia adelante y lo admiro profundamente por ello".

El exzaguero, y actual segundo entrenador del Watford recuerda que en sus inicios en Osasuna, "él estaba con nosotros, no era un jugador importante todavía para Osasuna, con ese carisma y ese arraigo de la tierra, pero la gente lo percibía así. Recuerdo en mis primeros partidos, que no a lo mejor no estaba acertado, que la gente pedía a Oier porque quería ver a gente de la casa y me alegro un montón por él, por superar esas dos lesiones, por hacerlo con naturalidad, y por vivir la profesión de manera ejemplar en cuanto a asentarse y darlo todo".

Otro jugador que salió de la cantera, como Mikel Merino, reconoce que Oier "ha sido una pieza fundamental por todos los años que ha estado compitiendo. Es uno de los jugadores que más veces partidos ha jugado, es de los más importantes, que más años ha estado en el club, que ha dedicado una vida entera y eso es muy difícil de conseguir en la alta competición y eso con todos los valores que tiene, con su perseverancia y su buen hacer, ha conseguido estar muchos años en la élite, y dando una cara a Osasuna. Porque ahora que estoy fuera ves en todos los equipos que cuando piensas en Osasuna piensas en Oier, por todos los años que ha estado ahí y ejemplifica muy bien los valores de Osasuna".

"Para mí ha supuesto un gran ejemplo. Yo tuve la suerte de coincidir con él en mis primeros años en la élite y el hecho de tener jugadores como él delante significa todo para un chico que acaba de subir, que no tiene la sabiduría de la élite a nivel profesional y él con su manera de ser, su ejemplo y su manera de actuar me dio la herramienta para seguir dedicándome a eso, seguir viendo que las cosas no son fáciles, que ha vivido momentos en los que no ha jugado, ha vivido lesiones y ha dado un ejemplo sobre cómo actuar", finaliza. l