"Ojalá que el País Vasco se vuelva un plató más seguido"

De festival en festival. Así está siendo el viaje de Tragedium, el cortometraje con ADN vasco dirigido por Gastón Haag (Montevideo, 1985) y protagonizado, entre otros, por el bilbaino Lander Otaola, con un rodaje íntegramente realizado en tierras vizcainas, en Plentzia. La trama se centra en el periplo de tres matones que se reúnen en el pueblo costero para cobrar lo que se les debe invadiendo la casa del matrimonio deudor. Sin embargo, no saben que la persona a la que atacan “guarda un secreto que va más allá de lo explicable”. Así, los cazadores se convierten en la presa.

¿De dónde nace su pasión por lo audiovisual? ¿Tenía algún referente cuando empezó?

Los referentes empezaron a aparecer con el tiempo, pero mi pasión por el cine surgió por una película: Parque jurásico. Me llevaron mis primos y mi madre a ver Parque jurásico, tendría siete años. Es mi película favorita, porque fue la que me tocó de chiquito el cuore (risas). 

Ahora ha combinado fantasía con terror, con toques de comedia en una historia que tiene como moraleja que no debemos meternos con la persona equivocada.

Exacto, y también que nunca sabes quién está al otro lado de la puerta. 

¿Qué prendió la mecha para crear este corto?

La idea nace en realidad de tantas cosas... Primero de la idea de hacer algo de terror y comedia en Bilbao, y segundo de una noticia que he leído. Era una cosa que obviamente no era real. Es de una persona que entró en una casa a darle una sorpresa a su pareja y parece que lo que se encontró fue un alien, y que se había enamorado de un alien. Me dio gracia, y había como comentarios abajo de gente: “Bueno, sí, puede pasar...”. Vi algo que me inspiró para hacer una historia, algo menos romántico y más de dos tipos que querían golpear a alguien porque les debía dinero. 

En este cortometraje ha tomado el papel de actor y director. ¿Cuesta compaginar ambos roles en un proyecto?

Costar cuesta siempre, porque te tienes que concentrar para una cosa y para la otra. Yo me acostumbré un poco, porque como empecé más como actor que como director, es algo que por defecto me acostumbré a hacer. Si bien me doy cuenta de que cuando voy a un rodaje solo como actor digo: “Bua, qué bueno”. Y cuando me tocan las dos cosas es un poco complicado. Hace poco también hice una serie que ahora se estrena que fue el rodaje más largo que he tenido. Me tocó las dos cosas y terminé molido, muy cansado. Necesité parar un poco porque es complicado. Es tener dos energías en un mismo lugar, y es complejo, pero yo me acostumbré y lo pude llevar. 

Cartel de 'Tragedium'. Cedida

El ADN vasco del corto está claro. Rodado en Plentzia, con actores vascos, productora vasca, directora de vestuario vasca... ¿Qué tiene Euskadi que exporta tanto talento audiovisual?

Lo que dijiste vos, mucho talento. Yo me encontré acá con un grupo de personas que son muy profesionales. Yo me animaría a decir que en País Vasco están de los más profesionales que me he encontrado a nivel audiovisual. Tienen talento, no solo es que son buenos y puntuales, sino que tienen un talento increíble. Veo mucho talento en vestuario, en arte... Todos han sido gente con la que siempre he trabajado. Sin ellos no puedo hacer nada. El cine es una tarea que hace un conjunto de personas. Ojalá que País Vasco se vuelva un plató más seguido de producciones también vascas, no solo de producciones de fuera. Sobre todo porque hay muchos cineastas acá que también tienen su forma y que estaría bueno que pudieran estar haciendo sus proyectos acá. Y no puedo dejar de destacar a Vivir rodando, la productora catalana, que son la otra mitad de este corto. 

Han ayudado a situar Euskadi una vez más en el ámbito internacional. Cuando se está rodando un cortometraje, ¿ya hay esa sensación de que un proyecto puede llegar lejos?

Sí, haber quedado en los dos festivales es muy difícil. Para nosotros fue un: “Bueno, dale, vamos a tirarlo, y si cae bien”. Y cayó dos veces. 

¿Dónde vamos a poder ver Tragedium además de en estos dos festivales?

Voy a hacer un preestreno acá en Bilbao para todo el equipo y todo el que se quiera acercar de manera gratuita, el 21 de noviembre en Bilborock. Vamos a hacer una jornada de puertas abiertas para que la gente vaya, nos vea, disfrute y una vez que ya pasó por estos dos festivales, pueda verlo acá. Eso es el 21 de noviembre, que es dentro de muy poquito.