Once alumnos de un centro educativo de Zumarraga van a ser juzgados este jueves por presuntamente acosar a un compañero de clase de su misma edad que intentó acabar con su vida en dos ocasiones, una de ellas "tirándose por una ventana". Los once escolares, de entre 14 a 16 años, son nueve chicos y dos chicas. A dos de ellos se les imputa también delitos leves de amenazas.
Pese a que dos de ellos cuentan con imputaciones añadidas, se ha solicitado que a los once se les imponga la misma sentencia: doce meses de taras socioeducativas para "trabajar y reflexionar sobre los hechos imputados y la responsabilización sobre sus actos".
La acusación particular, por su parte, eleva su petición para los once menores a 24 meses de tareas socioeducativas.
Desde 2021
Todo parece indicar que los hechos comenzaron en 2021, momento en el que la víctima inició segundo de la ESO en el centro educativo de Zumarraga. Meses después, en mayo de 2022, el centro inició un protocolo antibullying" que determinó la existencia de "acoso" contra este estudiante, quien "no parecía relacionarse de manera adecuada con el resto del alumnado" ya que "se encontraba solo" y "de manera continuada se le intentaba causar daño".
Según ha declarado la Fiscalía, en el inicio del siguiente curso, en septiembre de 2022, el centro educativo no "apoyó de alguna manera al menor de forma que no se repitiera la situación de acoso".
Así, el alumno perjudicado habría sido víctima de distintos insultos, vejaciones y empujones por parte de sus presuntos acosadores con intención de "humillarle" con expresiones como "microbio, átomo y enano disléxico" y además con amenazas en el caso de dos de ellos.
Acuerdo entre agresores
Según el Ministerio Público, los presuntos acosadores tenían "un acuerdo tácito entre ellos para hacer más difícil el día a día" de la víctima. Para ello, los agresores realizaban sus actos delante del resto de alumnos de la clase para que viesen y escucharan todo lo que sucedía.
Debido a las agresiones, la víctima abandonó el centro a finales de 2022 e inició un tratamiento médico el 10 de noviembre de ese mismo año.
El afectado ha sufrido desde entonces "dos episodios autolíticos", uno de ellos en noviembre de 2022 y el segundo en febrero de 2023, que requirieron "ingreso hospitalario" en ambos casos y fruto de los cuales debe ser medicado "diariamente".
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