Bizkaia

Onintze Salazar: “Cada vez hay menos sirimiri, pero no diría que desaparecerá”

La física y meteoróloga explica en Durango las consecuencias del cambio climático
Onintze Salazar ofreció una charla el pasado viernes en Durango en la que repasó los fenómenos meteorológicos extremos.

El cambio climático es una realidad. El calentamiento global está provocando cambios en los patrones meteorológicos y como consecuencia, los meses están siendo más secos y las temperaturas más altas. Este fue uno de los pronósticos que la física Onintze Salazar adelantó en la charla que tuvo lugar el pasado viernes en la biblioteca Bizenta Mogel de Durango. Se trataba de la cuarta conferencia que este experta en meteorología ofrecía con el objetivo de acercar al público la realidad de la crisis climática y sus efectos.

Ante una veintena de personas, Salazar comenzó su exposición enumerando los fenómenos extremos. Los huracanes, los ciclones tropicales, las tormentas, la nieve o las olas de calor. En base a un estudio realizado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el 50% de las catástrofes están generadas por situaciones relacionadas con el tiempo, generan el 45% de los fallecidos en el mundo y provocan el 74% de las perdidas económicas. “Muchos de ellos pueden generar destrozos importantes como el tornado, que desde un punto de vista personal como de la Física puede ser un fenómeno bonito y espectacular, pero es uno de los más destructivos por donde pasa. De hecho en Araba se han formado dos, pero ninguno de ellos atravesó un centro urbano, sino montes que arrasó. Uno de ellos tuvo lugar en 2018 en Legaire y el otro en 2014 en Bernedo”, comentó Salazar.

Ejemplos de fenómenos extremos a los que parece estamos encaminados en los próximos años en Euskadi debido a ese calentamiento global. “Con especial atención a los huracanes, ya que aunque surgen con una temperatura del mar en torno a los 26 grados, antes cuando llegaban a nuestro mar perdían fuerza, perdían la categoría de huracán porque el agua estaba más fría. Sin embargo hay estudios de estos últimos años que reflejan que cada vez se están acercando más a Europa. Es algo que tendremos que observar para ver su evolución”, aseguraba Salazar.

Cambios climáticos que también tienen su reflejo en el claro ascenso de las temperaturas, provocando más olas de calor y más continuadas en nuestro entorno. En Europa este fenómeno extremo provoca un alto porcentaje de fallecidos. “A mí me sorprendió este dato porque no relacionamos las olas de calor con tantos fallecidos. Aquí hay que explicar dos cuestiones: las muertes que se producen por un golpe de calor debido a las temperaturas extremas en un día y los fallecidos, que suele ser un porcentaje mucho mayor, debido a los consecuencias que estas olas provocan durante varios días seguidos. Y es que con días continuados de calor el descanso durante la noche suele ser malo, el cuerpo padece esos efectos y los fallecidos suelen producirse días después de ocurrir los episodios de calor extremo, afectando sobre todo a los mayores y niños”, explicaba Salazar. En datos, según un informe realizado de los últimos cincuenta años en Europa, en el cuarto puesto se encuentra el Estado español que alcanzó la cifra de 15.090 fallecidos como consecuencia de una ola de calor de 2003. En el primer puesto está Rusia con más de 55.000 muertos por otro episodio de calor extremo de 2010 y en segundo Italia con más de 20.000 decesos en 2003.

Al termino de la charla una de las oyentes preguntó a la física si el cambio climático podría provocar la desaparición del sirimiri. Onintze fue tajante en su respuesta. “Mi sensación es que cada vez tenemos menos sirimiri y es que para que tengamos este fenómeno deben darse unas características y debido al alza de las temperaturas las cosas están cambiando, pero no podría decir que el sirimiri vaya a desaparecer”, respondió.

16/01/2023