A falta de acometer pequeños remates de obra, el Ayuntamiento de Ortuella ha dado por finalizado el proyecto de urbanización acometido en el barrio de Otxartaga, Una reurbanización global que ha afectado a las dos zonas en las que se divide el populoso barrio y que ha permitido llevar a cabo una reforma integral del acceso a los portales desde el 1 al 27 y reacondicionar tanto los jardines traseros de los edificios como las carreteras y aceras frente a ellos.
“Era un compromiso con los vecinos de esta céntrica zona del municipio para mejorar sus condiciones de accesibilidad rodada y peatonal. En 2021 contratamos la redacción de esta segunda fase que hemos concluido y que ha servido para solucionar los problemas de accesibilidad existentes para acceder a estos portales”, destacó el alcalde, Saulo Nebreda. El regidor jeltzale recordó que, dentro del proceso de mejora de las instalaciones e infraestructuras de los diferentes barrios y zonas de la localidad, el Ayuntamiento de Ortuella desarrolló a principios de esta legislatura el proyecto de la primera fase de reurbanización del barrio Otxartaga, concretamente, de la zona que abarcaba los portales 1 y 17. Esta primera fase contaba con un presupuesto de ejecución de 536.705 euros a los que se suman los más de 440.000 de estas segunda fase. En esta ocasión, el proyecto ha permitido mejorar la urbanización superficial de las zonas rodadas y peatonales del entorno urbano de la zona alta de la barriada de Otxartaga en la que se ubican los bloques de viviendas números 18-23/24-27 en las que residen cerca de 300 personas. Asimismo, en las zonas de paso se ha creado una plataforma única facilitando la accesibilidad.
“El nivel de acabado de la urbanización es similar a la zona urbanizada de la parte baja del barrio, en cuanto a las características de los materiales de acabados, tales como: bordillo de granito, baldosas de árido granítico, asfalto estampado, mobiliario, etc.”, señalaron desde el Consistorio donde remarcaron que el desarrollo de esta obra “supone una clara mejoría tanto para los vecinos y vecinas de esa zona alta como para las familias que llevan a sus hijos e hijas al colegio Otxartaga.
Construido en la década de los cincuenta por el ministerio de la Vivienda –las primeras viviendas fueron inauguradas en diciembre de 1955–, este populoso barrio que acoge a cerca de 800 vecinos está formado por bloques lineales de vivienda colectiva que, de manera ordenada, aprovechan la topografía de la ladera de Otxartaga configurando un barrio de viviendas de VPO característicos de los años cincuenta y sesenta.