Pedro Sanchez ha tensado al máximo la cuerda con el PNV. El Gobierno español se ha desentendido del calendario de transferencias aprobado por su propio Consejo de Ministros y que no da frutos desde hace un año, y ha provocado que su socio más estable dé un golpe sobre la mesa. Un ultimátum. Andoni Ortuzar tomará medidas si no reactiva este mes de septiembre las mesas y los contactos para negociar la transferencia de competencias que recoge el Estatuto de Gernika. En concreto, el líder del EBB ha avisado este miércoles al presidente español de que los jeltzales se sentirán “libres” si no cumple su palabra. Fuentes de la Ejecutiva jeltzale consultadas por este periódico aclaran que se sentirán liberados de los compromisos, “abiertos a negociar, pero sin obligaciones ni ataduras, incluidos los Presupuestos Generales del Estado”. Este escenario, en el caso de confirmarse, dejaría a Sánchez sin el apoyo estable del PNV en las votaciones del Congreso de los Diputados. Esta advertencia se circunscribe a Madrid, y no a Euskadi y los gobiernos de coalición PNV-PSE.
Este aviso en Radio Euskadi no es uno más. El grupo jeltzale apretará con esta cuestión hasta finales de año, porque cree que es el último tren que le queda, ya que el Estado entrará sin disimulo en precampaña tras la aprobación de los Presupuestos estatales y el PSOE no querrá volver a abordar esta negociación.
El Gobierno español ni siquiera ha puesto en marcha los grupos de trabajo entre ambos gobiernos para abordar las transferencias y solo se dialoga sobre los trenes de cercanías, donde existe un compromiso verbal y genérico para alcanzar un acuerdo antes de la negociación de los Presupuestos estatales en octubre. Además, como adelantó este periódico, el Gobierno español pretende estudiar “alternativas” a algunos traspasos que ahora cree que son inviables, aunque él mismo los había incluido en el calendario aprobado por el Consejo de Ministros.
Ha pasado más de un año desde que se pactó el último paquete, que incluyó las prisiones, y la ausencia de resultados comienza a tener visos de decisión política y olvido deliberado. El lehendakari exigió la semana pasada que se activaran los cinco grupos de trabajo sobre las materias que propone la consejera Olatz Garamendi (autorizaciones iniciales de trabajo en migración, ordenación del litoral, meteorología, salvamento marítimo y fondo de protección a la cinematografía), pero no hay resultados.
Este desaire llega en puertas de las elecciones municipales y forales de mayo, y el PNV ve peligrar estos compromisos y se le complica explicar su respaldo a Sánchez ante la sociedad vasca. No obstante, este miércoles ha vuelto a aclarar que mantiene la apuesta por el socialista y por una legislatura reformista, y ha enfriado la expectativa de que la reunión con el popular Alberto Núñez Feijóo provoque un cambio de alianzas mientras siga en brazos de la ultraderecha de Vox. Es decir, este choque con Sánchez no se puede interpretar como un acercamiento a Feijóo. La situación es más complicada para el PSE, porque la ausencia de compromiso de su jefe Sánchez a la hora de cumplir el Estatuto de Gernika los deja en una posición incómoda ante el electorado.
Campaña de "machos ibéricos"
Lo que preocupa al PNV es que la legislatura estatal va a entrar en periodo de descuento. Por ello, va a apretar a Sánchez como nunca antes. Hay precedentes de avisos similares como sucedió en puertas de acordar el Ingreso Mínimo Vital, cuando Ortuzar dijo que todo podía irse “al carajo” y finalmente hubo acuerdo.
Ortuzar restó este miércoles credibilidad al argumento de los socialistas sobre las dificultades técnicas, porque “si aprobaron el calendario en Consejo de Ministros, ya habrían mirado que no había problemas técnicos”. “Tanto nosotros como el lehendakari hemos mandado un toque de atención. Ya no hay excusas ni de la pandemia ni de nada que nos obliguen a seguir en este ritmo caribeño”, dijo.
“El martes ya empezó la campaña electoral en el Senado, porque fue un debate de machos ibéricos donde, en vez de propuestas, salió testosterona, y eso quiere decir que nos espera una larguísima campaña electoral que tendrá como primera etapa las municipales. Siendo eso así, si se aprueban los Presupuestos, después de aprobarse los Presupuestos, se acabó la fiesta: vamos a entrar ya en campaña electoral sin disimulo. Entonces, aprovechemos estos meses porque todos somos conscientes de que en campaña las cosas son más complejas. Aprovechemos estos meses de aquí a fin de año porque lo que no se haga estos meses va a ser difícil que se pueda hacer. Nosotros vamos a apretar el acelerador y vamos a ser muy duros con el Gobierno”, avisó.
“ "Nosotros vamos a apretar el acelerador y vamos a ser muy duros con el Gobierno" Andoni Ortuzar - Presidente del EBB del PNV ”
Cuando se le preguntó si los jeltzales tomarán medidas si no hay novedades en septiembre, zanjó que “sí”. “Forma parte del acuerdo que suscribimos Pedro Sánchez y yo el 30 de diciembre de 2019, ahí está específicamente recogido que se iba a cumplir al milímetro aquel compromiso. Si ellos no cumplen, nosotros nos sentiremos libres”, dijo. El pacto recoge en su tercer punto el traspaso de las competencias a la comunidad autónoma, y de Tráfico a Nafarroa.
Seis meses sin hablar
Ortuzar confesó, como el lehendakari, que hace seis meses que no habla con Sánchez, sin contar algún whatsapp para abordar la situación de dos empresas vascas. Pero aclaró que mantiene la apuesta por este Gobierno, “que nadie tenga ninguna duda”. “Hemos votado más veces sí que el grupo parlamentario de Podemos”, llegó a decir. Pero pidió al Gobierno que “también dé la talla”. “No va a ser que nuestros seis humildes parlamentarios tengamos que tener la responsabilidad, la cabeza fría y los dos dedos de frente que les faltan a los demás. Si todo el mundo va de verbena, el PNV también”, avisó.
Nuevo estatus
Este bloqueo complica la posibilidad de que se reactive el nuevo estatus en el Parlamento Vasco (“si tenemos este parón en el Estatuto, ¿con qué visos de éxito podríamos entrar a negociar con Madrid una superación del Estatuto?"), y Ortuzar añadió que tampoco se dan las condiciones para un pacto PNV-PSE-Bildu-Podemos en Euskadi. Por ello, volvió a situar la ventana de oportunidad al final de esta legislatura vasca y principios de la estatal.