Crece la presión y el tono es de urgencia absoluta. El PNV exige a Pedro Sánchez que retire las piedras del camino antes de negociar los Presupuestos estatales para el próximo año. Andoni Ortuzar reclama al Gobierno español que cumpla los compromisos firmados anteriormente y que llevan meses paralizados o en cola, como la transferencia completa del Ingreso Mínimo Vital para que Euskadi gestione de principio a fin el pago de esa prestación social a los ciudadanos, la licitación de las obras del soterramiento del Tren de Alta Velocidad en su entrada a Bilbao y Gasteiz, y la reactivación del calendario de transferencias.
Cuando estos compromisos estén encarrilados, el PNV entrará ya en harina para negociar el contenido de las Cuentas, las partidas y las inversiones. "Antes queremos poner el contador a cero", defiende Andoni Ortuzar, quien apremia y urge con claridad a Pedro Sánchez para que se ponga "las pilas". Él mismo se va a implicar en el diálogo con los nuevos ministros.
Esta exigencia la ha repetido este martes el presidente del EBB en Onda Vasca y ya la había formulado en julio en una entrevista concedida a DEIA. Es una cláusula de confianza para que el PNV tenga garantías de que las cosas funcionan, para no tener la sensación de que sigue comprometiéndose con la estabilidad y ofreciendo sus seis votos en el Congreso de los Diputados mientras que La Moncloa no cumple su parte, implementa los acuerdos a marchas forzadas o los deja en un cajón que ya ni cierra por todos los asuntos pendientes acumulados.
"HINCAR LA RODILLA"
El portavoz jeltzale en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, trasladó esta apuesta por la lealtad mutua en la primera reunión que mantuvo el lunes de la semana pasada con el Gobierno español para realizar una primera aproximación a las Cuentas, que aún no se han presentado. Es una llamada de atención para el nuevo equipo de ministros de Sánchez tras la remodelación de julio. Ortuzar pide al Gobierno español que "en otoño se ponga las pilas", y que no cometa el "error" de pensar que el PNV no se va a "echar al monte" por muchos incumplimientos que haya.
"Espero que este nuevo equipo entienda que las cosas es mejor hacerlas a su tiempo, porque luego pasa factura al Gobierno. Y a mí no me gusta aparentar que es un chantaje. No se trata de que nadie hinque la rodilla, sino de que los acuerdos se produzcan cuando se debe", avisó Ortuzar. Recordó que el nivel de cumplimiento de lo pactado es "regular" y que el propio Sánchez en su informe interno reconocía que es del 21%, de manera que "hay que apretar el acelerador".
En ese sentido, aseguró que él mismo se va a implicar en el diálogo. Dijo que el PNV va a retomar la interlocución con los nuevos ministros (Aitor Esteban ya anunció que tiene apalabrada una reunión con la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, y la consejera Olatz Garamendi también está cuadrando agendas a falta de unos flecos). "Yo también me voy a incorporar. Esperamos que sea un otoño fructífero y podamos ganar el tiempo perdido, porque llevamos mucho retraso", zanjó.
EL BLOQUEO DE ESCRIVÁ
Ortuzar puso en evidencia que los cambios de ministros se han producido precisamente en las áreas más sensibles para el PNV, lo que obliga a construir la relación casi desde cero. En otros ministerios no ha habido cambios, como sucede con José Luis Escrivá, blindado en el Ministerio de la Seguridad Social a pesar de sus tropiezos con la reforma de las pensiones y a pesar de bloquear el traspaso del IMV.
Algunos ámbitos sondeados por este periódico detectan señales de que la negociación se va a intensificar, a pesar de las dificultades para convencer a este ministro de que la Seguridad Social no puede reservarse el control y la autorización final de los pagos. El planteamiento de Escrivá es una encomienda de gestión, mientras que el decreto 20/2020 del propio Gobierno español promete por escrito la transferencia y tendría que haber llegado el 31 de octubre del año pasado. La competencia en materia de asistencia social es, además, exclusiva de la comunidad autónoma en virtud del artículo 10.12 del Estatuto de Gernika.
Otro de los frentes abiertos con una ministra que también sigue al frente de su área, María Jesús Montero, se ha resuelto ya y ha quedado despejado del camino. La presión del lehendakari, quien amagó con no acudir a la Conferencia de Presidentes, ayudó a desbloquear la convocatoria de la Comisión Mixta del Concierto Económico para concertar nuevos impuestos sobre transacciones financieras y servicios digitales. En paralelo, el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, ha amarrado ya que Euskadi gestione 500 millones de los fondos europeos en tres años.
CUMPLIR LOS TRASPASOS
Con la nueva ministra Isabel Rodríguez queda pendiente concretar una reunión y que se reactiven los traspasos. Con su antecesor, Miquel Iceta, se sondearon los traspasos de inmigración, trenes de cercanías, ordenación del litoral y el propio IMV. En materia de transportes, Raquel Sánchez ha firmado el convenio para el soterramiento del tren en Zorrotza, y se espera que traslade la misma voluntad al TAV.
Quedan el IMV, el TAV y reactivar los traspasos. "Antes de empezar las negociaciones, y luego ya negociar los Presupuestos como hay que negociarlos, necesitamos o queremos poner el contador a cero. El contador de lo que nos deben. Y antes de negociar solemos exigir que se cumplan los compromisos anteriores. Teníamos tres temas antes del verano: TAV, IMV y la reactivación del calendario de transferencias, toda vez que ya hemos conseguido aclarar el tema de los nuevos impuestos en la Comisión Mixta del Concierto Económico. Vamos a intentar que esos tres temas estén en la pole position", recalcó Ortuzar.
PRESUPUESTOS VASCOS
Sobre los Presupuestos vascos para el próximo año, Ortuzar confió en que pueda haber acuerdo con Elkarrekin Podemos-IU, aunque le pidió que asuma una posición no maximalista tal y como hace en Madrid. "Tuvimos acuerdo en la Ley Antipandemia y espero que lo tengamos en los Presupuestos. Si yo aplicara los parámetros que Podemos ha aplicado hasta ahora en la negociación presupuestaria en Euskadi, el PNV tendría que votar no a los Presupuestos del Estado. Todos podemos tener posiciones maximalistas, pero los Presupuestos que se van a aprobar en Madrid y vamos a aprobar en Euskadi están dentro de una lógica europea, de unas normas de gasto. No puede ser que Podemos nos pida aquí la luna, y luego en Madrid trague con todos los requisitos de Europa", dijo. Se mostró "escéptico" con EH Bildu y cree que mira a las elecciones municipales y forales de 2023, y le pidió "altura de miras" porque "no todo es hacer confrontación".