"A disposición del partido". Bajo este encabezamiento en una carta dirigida al conjunto de la afiliación, el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, se abre a continuar un cuarto mandato al frente del PNV si así lo deciden los afiliados. "Donde crea que soy más útil, allí estaré. Es por tanto vuestra hora y vuestra decisión. Lo que decidáis estará bien. Solo os pido que participéis", destaca el dirigente jeltzale en su misiva tras meses de especulaciones y la gran expectación generada respecto a su decisión. Dentro del proceso de cambios y relevos desarrollados por la formación nacionalista, Ortuzar desbroza el sentir palpado estas semanas en su contacto personal con los alderdikides, detectando dos posicionamientos diferentes. Los hay "quienes creen que la renovación debe ser total, empezando por la propia figura del presidente del EBB. Y quienes consideran que es muy arriesgado cambiarlo todo al mismo tiempo y proponen un mix de renovación y continuidad (que no continuismo). Ambos grupos ofrecen razones convincentes para defender una u otra opción. Y ambas son perfectamente legítimas y defendibles en las asambleas que comenzarán la próxima semana", argumenta.
En este sentido, tras el trabajo desempeñado los últimos tres años, Ortuzar se pregunta "cómo damos coherencia a lo hecho hasta ahora en la elección de la presidencia del EBB y en los ocho asientos de burukides nacionales". "¿Hasta dónde debe llegar la necesaria renovación?", interpela antes de arrancar este lunes la primera vuelta del proceso electoral interno para la renovación del EBB, que culminará en la IX Asamblea General que se celebrará entre el 29 y el 30 de marzo en Donostia. Es decir, el líder del EBB, ante la opinión de numerosas y cualificadas voces internas, se ha percatado de que los cambios realizados, que afectaron a la designación del candidato a lehendakari y en buena parte de los Consejos Territoriales, necesitan un tiempo para afianzarse y que es bueno que la cabeza del partido siga para dar solidez al proceso de renovación y acompañar a las nuevas personas nombradas tanto en puestos institucionales como internos.
En un clima de gran convulsión en el Estado, el PNV pretende plasmar al completo los acuerdos del pacto de investidura suscrito el 10 de noviembre de 2023 por Ortuzar y Pedro Sánchez, con el compromiso de cumplir íntegramente el Estatuto de Gernika con el traspaso de todas las transferencias pendientes o abordar el debate sobre el nuevo estatus de autogobierno para Euskadi con "el reconocimiento nacional. De ahí la necesidad de contar con alguien con experiencia y contactos tanto en Madrid como en Bruselas para afrontar los importantes pero convulsos años que vienen tanto en política como en economía. En paralelo se halla otro de los motores tractores que pueden haber influido en su posición: el incipiente pero al parecer prometedor diálogo entre las fuerzas políticas vascas que está liderando, desde la discreción, el propio Ortuzar, y que puede desembocar en un nuevo estatus de autogobierno en un plazo no muy largo de tiempo. A su vez, a nadie se le escapa la volatilidad en que está sumida la situación política española, que puede traer en cualquier momento un proceso electoral y sus consecuencias, algo que se afrontaría con mejores perspectivas si se cuenta con alguien con bagaje a frente del EBB.
"En lo personal, en la medida que una decisión u otra atañe a mi persona, quiero deciros que para mí ha sido, es y será siempre un honor estar al servicio de este partido. Quienes me conocéis sabéis que soy un optimista vital y siento pasión por lo que hago en cada momento, sea esto lo que sea. Creo en el PNV y en el futuro del PNV", destaca Ortuzar en su carta, donde precisa: "La ración de ego que todos y todas tenemos está colmada en mi caso. Sinceramente, creo que también está probada mi capacidad de compromiso y dedicación a la causa abertzale y jelkide". "Toca ahora escuchar las propuestas que salgan en nuestros batzokis. Yo estoy a disposición de este partido para lo que necesite. Donde la afiliación crea que soy más útil, allí estaré. Es por tanto vuestra hora y vuestra decisión. Lo que decidáis estará bien", recalca Ortuzar.
El proceso
La primera vuelta del proceso de renovación del EBB se celebrará del 20 de enero al 2 de febrero. Las bases jeltzales deberán proponer en sus batzokis a una persona como presidente o presidenta del EBB y a seis más como burukides. Pasarán a segunda vuelta aquellos que obtengan el respaldo de al menos tres organizaciones municipales. En esa segunda ronda, que se celebrará del 10 al 26 de febrero, la afiliación elegirá un candidato a la presidencia del EBB y a ocho burukides. Las Asambleas Territoriales se celebrarán entre el 27 de febrero y el 26 de marzo y en ellas los apoderados de cada organización municipal, por voto imperativo propondrán a las personas designadas en segunda vuelta en su respectivo batzoki. Del mismo modo, los representantes de cada Asamblea Territorial, por voto imperativo, tendrán que votar en la Asamblea Nacional que se reunirá en el marco de la Asamblea General a las personas designadas en su respectivo Territorio. Son un centenar las personas con derecho a voto en la Asamblea Nacional, que son designadas por la Asamblea Territorial de Bizkaia (38 representantes), de Gipuzkoa (19), de Araba (18), de Nafarroa (15) y de Iparralde (5), y por las Organizaciones Extraterritoriales de Madrid (1), Argentina (1), Chile (1), México (1) y Venezuela (1).
Los nuevos miembros del EBB, con su nuevo líder, serán proclamados en la Asamblea General los días 29 y 30 de marzo. Además, se aprobarán definitivamente las cinco ponencias que el EBB aprobó y remitió el pasado 9 de diciembre a las organizaciones municipales para su debate, y a las que se presentarán enmiendas. Se trata de Euskadi, nación en Europa: soberanía, identidad y objetivos políticos; Construir una nación próspera para ser más libres: justicia social y garantía de derechos de la ciudadanía; Una nación abierta a un mundo mejor, sostenible y en paz; EAJ-PNV, un partido al servicio de un pueblo: vínculos con la ciudadanía vasca, y Una organización democrática, de militancia y ágil para responder a los retos políticos y sociales de Euskadi. El PNV no ha renovado ponencia política desde 2007, cuando todavía Josu Jon Imaz era presidente del EBB y estaba como lehendakari Juan José Ibarretxe. El documento fue aprobado el 10 de septiembre de ese año y el día 12 Imaz anunció que abandonaba la política y renunciaba a postularse a la reelección al frente del partido.