Osakidetza abre la primera unidad especializada para covid persistente

Cinco años después de que el 30 de enero de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretara el máximo nivel de alerta sanitaria por el covid-19, Osakidetza ha anunciado la creación de una unidad específica multidisciplinar para canalizar la atención a estos enfermos de covid persistente, un servicio muy demandado por los pacientes de long covid en Euskadi que reclamaban unidades especializadas para su tratamiento.

La atención de los pacientes con casos más graves y complejos se centralizará ya en febrero en el hospital vizcaino de Basurto, pero posteriormente se abrirán nuevas unidades en Araba y Gipuzkoa.

No en vano, también a los médicos les sigue preocupando el covid persistente. Se estima que, al menos, un 10% de los contagiados experimentan síntomas que persisten más allá de las 12 semanas desde el inicio de la enfermedad, afectando su calidad de vida y capacidad laboral.

“No conozco a ninguna persona que se haya curado como tal. En algunos casos puede haber una leve disminución en la intensidad de algún síntoma, pero mejorar realmente, no. De hecho, la mayoría hemos empeorado”, señaló recientemente Isabelle Delgado, presidenta de la asociación Long Covid Euskal Herria, que lleva cinco años de lucha para que esta enfermedad no caiga en el olvido.

NO HAY UN REGISTRO OFICIAL

Las necesidades de estos pacientes, recuerdan, “siguen sin ser resueltas, ni en el ámbito de la salud ni en el sociolaboral”. Además, uno de los principales problemas para dimensionar el alcance del covid persistente es la falta de un registro oficial, lo que dificulta que la enfermedad tenga el reconocimiento necesario.

Para dar respuesta a esta demanda reiterada, el consejero de Salud, Alberto Martínez, ha anunciado la puesta en marcha este mes de febrero de la nueva unidad de covid persistente de Osakidetza en el Hospital de Basurto, centro que trabajará en red con otros centros sanitarios de Euskadi para tratar a pacientes de casos graves y complejos y que dará servicio a los tres territorios. Posteriormente, abrirá unidades en Araba y Gipuzkoa.

CON CONSULTAS DESDE EL 26 DE FEBRERO

Según explicó Martínez en una entrevista en Radio Euskadi, esta unidad que va a estar a cargo del servicio de Neurología y Enfermería, y podría comenzar a funcionar a partir del 12 de febrero “con las agendas y con consultas no presenciales inicialmente entre profesionales para valorar los casos” .

Y a partir del 26 de febrero podría estar ya en disposición de citar a los pacientes de forma presencial. “La unidad pretende mejorar la calidad de vida de los pacientes, promover su recuperación y ofrecer un tratamiento personalizado”, indicó el consejero de Salud. Hay que señalar que Alberto Martínez vivió en primera persona el impacto del tsunami del coronavirus como Jefe de Servicio de Reanimación del Hospital de Cruces.

BAJO MINIMOS

Pero de ser la mayor crisis sanitaria en un siglo y castigar sin piedad todo el sistema sanitario ha pasado a ser un virus respiratorio más y estar bajo mínimos ya que esta temporada, el coronavirus está pasando prácticamente inadvertido.

El consejero resaltó que este invierno se está dando una mayor incidencia de la gripe, pero con casos menos graves, debido al incremento en la vacunación, mientras que la presencia de covid está siendo “bajísima”, aunque en verano sí “fue algo más”.

Martínez incidió en que este año está teniendo “más incidencia que nunca de gripe o de virus en general”, lo que ha provocado un aumento en las consultas de atención primaria y las consultas de urgencia. “Prácticamente las consultas de atención primaria son como 50.000 más desde octubre y las urgencias aún más”, detalló.

MENOS INGRESOS POR GRIPE

Sin embargo, reiteró que los ingresos hospitalarios y los ingresos en las UCI son menores que el año pasado, lo que evidencia que “la gripe o los virus que la acompañan son menos graves que el año pasado” debido a la campaña de vacunación que “incrementó de forma sustancial, prácticamente un 4,5% la población vacunada, pero sobre todo consiguió doblar el número de niños de seis meses a cinco años que se vacunaron”.

Martínez precisó que la incidencia de la gripe “está en las cifras normales para esta época del año” y, de las 508 camas previstas en el plan de contingencia (que contemplaba que después de Reyes “se alcanzaría el pico”), se están utilizando “alrededor de trescientas y algo”.

Y es que en concreto, en Gipuzkoa y en Araba está bajando la incidencia, mientras que en Bizkaia “hay un pequeño repunte que es también normal, habitual y que no tiene mayor trascendencia”, afirmó