Osasuna, un mes con una sonrisa

El partido con el Celta es el primero que tiene Osasuna en el camino hasta el encuentro de vuelta de las semifinales de Copa en San Mamés, el 4 de abril (22.00). En el mes que tiene por delante, Osasuna tiene un calendario duro. Juega en casa con el conjunto gallego y el Villarreal, dos citas con un elevado grado de complicación, y fuera en los campos de Valencia y Mallorca, es decir contra un rival que juega con la soga al cuello desde hace tiempo y con otro que es un muro en su estadio. El partido con el Mallorca será el viernes anterior al martes de Copa en San Mamés, con lo que el señalamiento de los encuentros no es un disparate como en la ida de las semifinales de esta semana –domingo por la noche en Sevilla y miércoles en Pamplona–. La mejor manera de preparar la Liga es la Copa y Osasuna va a tener de todo, fuera dos buenas probaturas, para afilar su forma.

Hay buen ambiente en la plantilla porque se ha respondido a las expectativas en las dos ultimas citas, los difíciles partidos contra Sevilla (2-3) y Athletic, que abre en estos momentos un panorama esperanzador y atractivo para lo que resta de temporada, la parte crucial del campeonato.

Chimy Ávila bromea con Aimar Oroz en el entrenamiento de ayer. Oskar Montero

El primer hecho es que el conjunto rojillo tiene en la Liga 33 puntos y una victoria frente al Celta supondría un espaldarazo en la clasificación de la Liga, la confirmación que en el campeonato regular también puede encontrarse un premio a final de temporada.

La plantilla se entrenó ayer en Tajonar con los jugadores divididos por grupos en función de su participación en el encuentro del miércoles. Moi Gómez acabó con la mano derecha lesionada y vendada después de una mala caída y ayer no compareció en los campos de entrenamiento. En principio, no se ha facilitado parte médico sobre él por lo que el percance no parece que haya revestido importancia. Sí quedó peor parado Kike García, que se se ejercitó con menor carga de trabajo debido a un traumatismo sufrido en el pie derecho por un pisotón

Osasuna tiene días por delante para preparar el próximo encuentro, contra el Celta en El Sadar, ya que al ser en lunes va a permitir la recuperación de fuerzas. De todos modos, Arrasate ya sabe y ha demostrado que tiene fondo de armario como para tirar de mucho personal y ofrecer alternativas. Está en condiciones de insistir con futbolistas habituales pero con importancia, pero también en otorgar de nuevo la confianza a otros que están respondiendo, con el partido en el Sánchez Pizjuán como ejemplo satisfactorio y reciente.

Osasuna-Athletic, resumen y gol de Abde RFEF