Osasuna se abonaría a los resultados de los dos encuentros que lleva con el Sevilla esta temporada, idéntico marcador en Liga y Copa en El Sadar (2-1), pero el tercer partido oficial del curso parece menos favorable a los intereses de los rojillos. Primero, porque se dirime el compromiso en el Sánchez Pizjuán, y, segundo, porque Osasuna anda con la cabeza en otra parte y está obligado a repartir fuerzas para la ida de la semifinal de Copa, el partido más importante de los últimos tiempos. Si a ello se suma que el estadio del Sevilla no es precisamente un buen lugar para los intereses de los osasunistas, casi todo parece empujar en contra, menos el factor sorpresa, que siempre está presente en el deporte y más en el fútbol, y el recordatorio de que “las estadísticas están para romperlas”, el argumento principal cuando el horizonte está en negro.
Osasuna le ha ganado al Sevilla los dos partidos que llevan cruzándose esta temporada. El primero, el partido inaugural de la Liga en El Sadar en donde los goles de Chimy Ávila (minuto 9) y Aimar Oroz (minuto 74) quitaron todo el valor al de Rafa Mir (minuto 11) y tumbaron al Sevilla de Lopetegui, entonces técnico. Oroz se estrenó en la temporada como titular marcando de penalti.
La otra victoria sobre el club andaluz es más reciente, del mes pasado, y tiene toques épicos porque supuso la clasificación para las semifinales de la Copa en la prórroga. Osasuna fue mejor que su rival, marcó primero por mediación del Chimy (minuto 71) y el Sevilla forzó el tiempo suplementario con gol del empate en el minuto 95 gracias a En-Nesyri. Abde, a los nueve minutos del inicio de la prórroga (minuto 99) estableció el marcador final. Sampaoli, el nuevo entrenador, ya estaba en el banquillo.
Por tercera vez se ven las caras los dos equipos y Osasuna, que no ha hecho malos partidos en el Sánchez Pizjuán pero casi siempre se ha visto desprovisto del premio, tiene que irse hasta la temporada 2005-06 para rescatar la última victoria por allí. Fue con Javier Aguirre como entrenador y Savo Milosevic firmando el gol de la victoria en el minuto 60 de partido, en la jornada 22 de Liga, el 5 de febrero de 2006, hace 17 años. Osasuna jugó con Ricardo; Javier Flaño, Josetxo, Cuéllar, Clavero; Delporte, Raúl García, Puñal, Moha (David López, m.57); Milosevic (Iñaki Muñoz, m.85) y Bernardo Romeo (Cruchaga, m.76).
El Sevilla estaba entrenado entonces por Juande Ramos y su alineación estuvo formada por Palop; Dani Alves (Kepa, m.69), Dragutinovic, Javi Navarro (Jesuli, m.86), David Castedo; Adriano, Maresca, Pep Martí, Jesús Navas; Luis Fabiano (Saviola, m.56) y Kanouté. Pitó Miguel Ángel Perez Lasa y el partido estuvo bien animado en el apartado disciplinario porque hubo trece tarjetas amarillas, siete para el Sevilla y seis para Osasuna, y una roja para el sevillista David Castedo en el minuto 89.
El anterior partido con premio para Osasuna en el Pizjuán fue en la tempoada 2008-09 con goles entonces del local Jesús Navas y del atacante rojillo Walter Pandiani.