La junta directiva de Osasuna ha decidido suspender de empleo y sueldo a Luis Ariel del Molino, Director de Seguridad del club, tras los incidentes acaecidos en el estadio de El Sadar el 14 de enero de este año, en el transcurso del partido que enfrentaba al C.A. Osasuna frente al R.C.D. Mallorca, cuando fueron retiradas de la grada diversas banderas y pancartas, entre ellas la ikurriña y la bandera navarra. No se especifica en el comunicado emitido hoy por cuánto tiempo va a ser suspendido.
En la reunión de la Junta celebrada el 16 de enero 2023 se acordó la apertura de expediente para investigar los hechos. En reunión al efecto ayer martes, la dirección del club ha adoptado por unanimidad los siguientes acuerdos, dice la nota:
- Calificar como 'muy graves' los hechos ocurridos en el citado partido.
- Imponer la sanción que corresponde según el régimen disciplinario del convenio colectivo vigente al Director de Seguridad del C. A. Osasuna suspendiéndolo de empleo y sueldo.
- Comunicar a la empresa de Seguridad contratada para los eventos en el estadio de El Sadar las Normas de Régimen Interno del club e implementar nuevas técnicas de comunicación para los partidos y/o cualquier espectáculo que se celebre en las instalaciones del C.A. Osasuna.
- Trasladar a los interesados y a la opinión pública los acuerdos adoptados.
Aquella tarde el ambiente en el estadio pamplonés se enrareció por la retirada de dos ikurriñas en la zona de Graderío Sur –también de algunas otras banderas y pancartas– que finalmente sí se pudieron desplegar tras unos momentos de tensión entre aficionados y empleados de seguridad, aunque sin que la sangre llegara al río.
El club ofreció explicaciones de lo ocurrido a petición de este periódico. En primer lugar, desde la entidad matizaron que la Ley del Deporte obliga a comunicar antes de los partidos cualquier elemento que se vaya a colocar en la grada, pero que el protocolo habitual de la seguridad de Osasuna es el de aplicar un criterio flexible. De hecho, las banderas y pancartas que se retiraron suelen estar siempre ubicadas en esa misma zona.
Sin embargo, lo que ocurrió, según la versión del club navarro, es que en la previa del partido se desplegó en Graderío Sur una gran pancarta llamando a una manifestación convocada para el 28 de enero en Pamplona por Gazte Koordinadora Sozialista, algo de lo que nadie había informado previamente. Al parecer, al coordinador de seguridad de Policía Nacional, máxima autoridad en el estadio, no le sentó bien y ordenó a los miembros de seguridad de Osasuna retirar todas las banderas y elementos que no hubieran sido comunicados de antemano, lo que provocó el malestar de los aficionados.
Tras unos instantes de tensión y cánticos contra la directiva, molesta con la decisión del coordinador de Policía Nacional, se llegó a un acuerdo para desplegar el material retirado.
Una de las pancartas retiradas fue la de un chaval que le pedía la camiseta a Darko. Al finalizar el partido, el serbio corrió hasta la zona donde estaba el aficionado para darle la camiseta... y llevarse la pancarta.