EH Bildu cerró la campaña de las elecciones europeas repitiendo el mensaje que ha defendido en estos quince días: se volvió a presentar como un dique de contención frente a la derecha y la ultraderecha. Lo hizo añadiendo como matiz que los votos de la coalición abertzale, según su candidato Pernando Barrena, son “imprescindibles” también “para que PP y Vox puedan llegar al Gobierno” en el Estado español. Este mensaje llega después de que el PNV recordase que eran sus votos, los votos jeltzales, los decisivos para que Alberto Núñez Feijóo pudiera ser presidente y le dieron un portazo. El PP intentó hasta el último momento ese respaldo del PNV, que no llegó, porque en la fórmula estaba Vox. Pero, al margen del mensaje de fondo, su coordinador general, Arnaldo Otegi, se fijó un nuevo objetivo más allá de ganar en votos en la CAV y Nafarroa: conseguir el escaño de Barrena, que es el segundo en la lista Ahora Repúblicas encabezada por ERC, solo con los votos de Hegoalde, es decir, de Bizkaia, Gipuzkoa, Araba y Nafarroa.
En realidad, el escaño lo va a conseguir de todos modos con la fuerza de ERC, que es quien lidera la lista. Bildu va en segunda plaza. Pero lo que se pretende es lograr un número de votos que permita a Bildu defender que, incluso sin ERC, hubiera logrado el escaño. Es decir, que no se relativice con el argumento de que es ERC quien tira del carro por el abultado censo electoral catalán sobre el total del Estado. En cualquier caso, es una forma de esquivar el hecho de que Bildu no se presenta en Iparralde, y hace el cómputo restando tres de los siete herrialdes vascos. El objetivo, en principio, es factible por el nivel de movilización de su electorado en todas las elecciones. Con un nivel de participación de entre el 40 y el 50%, necesitaría más de 300.000 votos.
En un mitin en Gasteiz, Pernando Barrena defendió que su grupo es “una propuesta antifascista”. Además, quiso volver a matizar que no solo defiende que Israel salga de Palestina, sino también Rusia de Ucrania, una aclaración que llega tras el plante de EH Bildu al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en el Congreso.
Otegi, en cualquier caso, volvió a presentar como algo disparatado el gasto militar para ayudar a Ucrania, con el argumento de que ahora se permitirá lanzar misiles sobre objetivos rusos. “Todavía hay gente que sigue empeñada en decirnos que es posible derrotar a Rusia en el campo de batalla. ¿Nos puede decir alguien cómo se derrota a una potencia nuclear? ¿Nos plantean una tercera guerra mundial?”, dijo.
'PNV style'
En una clave más doméstica, insinuó que el PNV ha hecho campaña con alusiones a Bildu, aunque el propio Otegi cerró el mitin con una imitación del lema de Andoni Ortuzar: “Oso lasai gaude, PNV style”.
También este viernes, Euskal Herriko Kontseilu Sozialista, crítico con la línea posibilista de la izquierda abertzale, se manifestó en Donostia pidiendo la abstención. La manifestación pretendía deslegitimar a la Unión Europea, la OTAN y las políticas de austeridad. Desde que surgió esta sensibilidad, EH Bildu ha insistido en restarle repercusión con el argumento de que es un sector ajeno a la izquierda abertzale.