EH Bildu ha aprovechado este sábado la primera reunión de su mesa política de Hegoalde para repetir que abrir la puerta a los acuerdos de país con el PNV es compatible con reservarse espacios para “competir” y escenificar su alternativa de “izquierda”. El encargado de dar carta de naturaleza a esta estrategia ha sido su secretario general, Arnaldo Otegi. Era algo que ya se intuía por los últimos movimientos de EH Bildu, que se ha desmarcado de la reforma fiscal de PNV y PSE. Otegi no se refirió a ella en ningún momento en la comparecencia de este sábado. EH Bildu ha acordado los Presupuestos de Bizkaia y Araba, dos instituciones lideradas por el PNV, pero ha rechazado los del Gobierno vasco y también se opone a la revisión fiscal de los jeltzales y los socialistas. Además, ha abierto otro flanco para la discrepancia con el PNV al cuestionar la pervivencia de tres haciendas forales en la comunidad autónoma vasca. Mientras tanto, las divergencias entre EH Bildu y PNV en el Congreso de los Diputados se mantienen en asuntos como el gravamen a las empresas energéticas o el alcance de la reforma de la Ley Mordaza, una realidad que choca con la propuesta de coalición electoral para las generales y las europeas que lanza Otegi.
El secretario general de EH Bildu compareció tras la reunión de la mesa en Donostia, donde defendió que la mayoría del país quiere hacer políticas antineoliberales. También apostó por “elevar el campamento base de nuestro autogobierno y nuestros derechos nacionales”. “Creemos que hay espacio para la unidad y para los acuerdos de país, pero también hay espacio para la alternativa. La nuestra es una propuesta alternativa de izquierda”, sostuvo. EH Bildu defiende que hay “espacios para la unidad”, pero también “espacios para la competencia” porque, a su juicio, es positivo que se visualice una alternativa de izquierda.
Franco
Por otro lado, Otegi sacó a colación el 50º aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco, que el Gobierno español quiere conmemorar. Otegi puntualizó que el franquismo no terminó con la muerte del dictador, y se fijó como “uno de los máximos retos” de la mesa de EH Bildu “desatar el atado y bien atado” de Franco. “Ese camino empieza por reconocer que Euskal Herria es una nación. Aquí no hay un conflicto nacionalista, hay una nación con dos estados que niegan nuestra condición nacional”, reivindicó.
Otegi quiso también poner en valor la composición de la mesa de EH Bildu y, como ya hizo cuando se envió la propuesta a la militancia, volvió a bromear con que algunos (él) suben la media de edad. Dejó caer que no sabe si es motivo de autocrítica. Destacó que hay una representación mayor de mujeres que de hombres y una media de edad de 46 años.