El matrimonio formado por Valentín Fernández, de 88 años, y su mujer Isabel Oyón, de 76 años, vecinos del 1ºE de la travesía Monasterio de Cilveti, apenas se dieron cuenta, por suerte, de la amenaza del fuego que estuvo cerca de sus viviendas.
Una de sus hijas acudió al piso a primera hora después de que un amigo que vive enfrente le alertara de que se estaba quemando el bloque de sus padres. Ella, que subió con bomberos y policía, recuerda que cuando entró en el piso “ellos se estaban despertando y aún no se habían enterado de nada.
De hecho, mi madre estaba levantando las persianas justo cuando he llegado y no sabía lo que ocurría, tan solo ha dicho que escuchaba mucho ruido pero no le ha dado importancia”. Su piso estaba intacto y al matrimonio les midieron los valores en sangre para conocer si podían sufrir alguna posible intoxicación por humo, pero estaban en buen estado.