Otxandiano escribe su propio mensaje de fin de año y Kortajarena solo ve otra “imagen” en Pradales

Desde que EH Bildu empató a 27 escaños con el PNV y quedó por detrás en número de votos, la coalición abertzale aprovecha cualquier ocasión para tratar de escenificar su alternativa, presenta a su portavoz Pello Otxandiano como el líder de la oposición y lo reserva para las grandes ocasiones. El martes, 31 de diciembre, el día señalado en el calendario para el discurso de fin de año del lehendakari, Otxandiano publicó su propia reflexión antes de que lo hiciera Pradales, con un breve texto a primera hora de la mañana en la red social X, para reivindicar la “mayoría abertzale y progresista sin precedentes” que ha dejado 2024 y para defender la articulación de una “amplia mayoría basada en el reconocimiento nacional y las políticas postneoliberales”. Hasta ahí llegó la intervención de Otxandiano porque, cuando se conoció el discurso de Pradales, la valoración la hizo Nerea Kortajarena, quien a su vez restó trascendencia al mensaje del lehendakari y solo vio en su Gobierno un “cambio de imagen”.

Kortajarena aseguró que a EH Bildu le preocupa “la distancia cada vez más evidente entre esa retórica de grandes palabras y la práctica política de este gobierno”. La también portavoz parlamentaria dijo que Pradales ha trasladado simplemente sus “buenas intenciones”, y deslizó que ha intentado “delegar” su responsabilidad en los jóvenes. Sobre sus referencias a Aguirre, trató de contraponer el hecho de que el primer lehendakari “fue capaz de articular un gobierno de frente amplio en un momento histórico muy complicado”. Kortajarena añadió que el año 2025 será el momento de “demostrar” que se está a la altura de los problemas y ver qué sucede con la vivienda, los salarios u Osakidetza. A su juicio, hasta ahora se ha visto más “una campaña” para cambiar de “imagen”. EH Bildu, por su parte, aprovechará el año para tratar de presentarse como alternativa y, por otro lado, defendió la “excepcionalidad vasca” frente al “ruido e ineficacia” de la política española”. Reivindicó que el pueblo vasco es una nación y debe reconocerse en 2025.

PNV y PSE

Desde los socios de Pradales en el Gobierno, el PSE, por boca de su secretario general Eneko Andueza, se quedó con la sensación de que se van a poner en marcha “muchas políticas pensadas para mejorar nuestro bienestar”, y cree que “es el momento de apostar por Euskadi, de hacer país desde ya, con más justicia social, con unos servicios públicos más fuertes”. Desde el PNV, Joseba Díez Antxustegi puso en valor que se haya dirigido a los jóvenes para trasladar una apuesta ilusionante.

Críticas de la oposición

Desde la oposición, el PP, en palabras de Javier de Andrés, quiso forzar una “contradicción” entre el discurso del lehendakari y del PNV, y aseguró que Pradales dice que es europeísta mientras el PNV, según su interpretación, “ha apoyado a los candidatos de Orban y Meloni”. Añadió que tampoco parece europeísta “descalificar” a los partidos que defienden la unidad. “O va en contra de su partido o desvela las contradicciones de su partido”, dijo.

Desde Sumar, Alba García acusó al lehendakari de pronunciar un discurso “conformista”, que da “continuidad al modelo obsoleto que, como él mismo anuncia, no es nada original”. “Sigue ofreciendo las recetas del pasado, con un modelo sin ambición que no aporta soluciones”, despachó. Desde Vox, Amaia Martínez dijo que la solución a los problemas “no llegará con más autogobierno, como pretende Imanol Pradales, sino de más España”.

Desde Podemos, que no tiene representación parlamentaria, su líder Richar Vaquero se preguntó qué quiere decir Pradales cuando invita a los jóvenes a vivir a su manera, porque hay una “grave emergencia habitacional”. Añadió que la paciencia, esperanza y confianza que pide Pradales deben basarse en datos y políticas valientes.