No todos los días uno de tus jugadores cumple cien goles con tu camiseta. El domingo fue un día grande. Mikel Oyarzabal estaba de enhorabuena tras hacerse centenario con su tanto desde el punto de penalti. El capitán ofreció una emotiva y sentida rueda de prensa: "Fue un día muy especial y bonito. Los números son importantes, es relevante marcar goles y ganar, pero con lo que me quedo es con el cariño de la gente, de toda la Real. Siento que estoy muy respaldado valorado, que la gente me quiere y valora lo que hago y, para mí, eso es lo más importante. Pero quiero seguir, no pienso parar; no quiero que esto acabe aquí, mi idea es ayudar más a la Real a que todos juntos vayamos para arriba".
Son ya ocho los jugadores que han alcanzado dicha cifra. O lo que es lo mismo, que entraron para siempre en el Olimpo txuri-urdin: "Es un orgullo poder entrar en esa lista. Al final, pasan muchos jugadores por aquí y conseguir algo así me enorgullece, hace que tú estés feliz, que los de tu alrededor estén felices. Y eso es lo más importante, poder hacer feliz a la gente que me rodea, que siente y ama la Real tanto como yo. Pero quiero seguir creciendo, que todos juntos de la mano crezcamos, sigamos en la línea ascendente de los últimos años".
Sobre su rabiosa celebración del gol, explicó que "fue un cúmulo de circunstancias. A los que jugamos arriba nos gusta marcar y cuando no estás contento contigo mismo te sale esa rabia. La gente me ha ayudado mucho y yo intento darles alegrías".
Leyenda viva
Mikel lleva bien convivir con el personaje de leyenda viva de la Real y lo mucho que representa: "Soy como soy, los que me conocen saben que no me gusta salirme de la línea, que soy un chico tranquilo, familiar, amigable, de los que le gusta intentar ayudar a los que quiere en todo lo que puede, y poco más. No darle más vueltas sin volverme loco y sin darle la importancia que quizá se lo merece, e ir intentando normalizar todo".
La posibilidad de ser un nuevo one club men le atrae y cada vez la siente más cerca: "Sí, pero esto es fútbol, es vida y nunca sabes lo que puede pasar. No sé cómo me voy a despertar mañana, no sé pasado mañana la idea que puedo tener yo, la idea que puede tener el club… Sé que ahora mismo estoy feliz aquí, valorado y respaldado por el club, que la gente me quiere… Y yo también valoro el esfuerzo que hace la gente de la Real. Nunca sabes lo que puede pasar en el futuro, pero yo estoy donde quiero estar y haciendo lo que más me gusta".
Oyarzabal ha recibido duras críticas en este inicio de temporada; "Estamos acostumbrados, yo llevo muchos años aquí y sé cómo funciona. Cuando las cosas no me salen bien, voy a intentar ayudar con otras que no sean números o goles, pero yo me siento que estoy valorado aquí, tanto por el míster como los compañeros, por toda la gente. Cuando no me salen bien las cosas, el primero que lo sabe soy yo. No hace falta que nadie me diga que no estoy haciendo las cosas como me gustaría, pero por esa parte estoy tranquilo, intentando naturalizarlo también. Cuando tocan errores, hay que saber llevarlo también, pero estoy tranquilo. En el momento que mis compañeros, el entrenador o el staff me digan que no estoy haciendo las cosas como debo es cuando me debería preocupar, pero estoy seguro de que eso no va a llegar porque sé lo que tengo que hacer".
Sin polémicas y penalti claro
Oyarzabal quitó hierro al supuesto cruce de declaraciones con Imanol, tras el derbi: "Parecía que yo había respondido, que tal… Suposiciones que se hacen, las redes sociales, en algún momento algún malentendido que pueda haber de algún periodista o de algún informador... Esto es el pan de cada día. Yo tengo la confianza suficiente con Imanol para que si hay algo que no me gusta decírselo a él, y él igual. Si tiene un problema o hay algo que no estoy haciendo bien, decírmelo a mí. Sacar cosas de contexto o crear malentendidos no es bueno. A mí no me importa y creo que a Ima tampoco. Nos conocemos desde hace mucho, sabemos cómo es uno, cómo es el otro, y este vestuario y este grupo están más unidos que nunca. En ese aspecto no hay de qué preocuparse. Entender también la postura de que es fácil hablar, y ya está".
Por último, el 10 explicó que el penalti ante el Betis no le ofreció ninguna duda: "Lo sé yo y lo sabe el que me pega. En directo todos los que estamos alrededor lo hemos escuchado. No sé cómo se vio en las imágenes, si es mucho o es poco, pero en el momento que me pegó tenía claro que era penalti. No sé si lo dirá o lo habrá dicho, pero todos los que estuvimos alrededor lo hemos escuchado. Él fue a a despejar la pelota, me golpeó y ya está".