Pasarela a los 90

Es imposible que quien ayer se acercara a mediodía al paseo de La Concha no las viera. No solo por sus llamativos colores, sino por la luz que irradiaban sus sonrisas. Lolo Bräuer (83 años), Maria Luisa Fernández (88), Maria Ángeles Ortega (89), Pili Arruti (90) y Cristina Gómez (80) difícilmente olvidarán la experiencia vivida de la mano de la coach de imagen Cristina Pérez, que las convirtió en modelos por un día al hacerlas protagonistas de su especial de Navidad de este año. 

“Ha sido divertidísimo. Nos miraba todo el mundo, nos sacaban fotos, nos saludaban. Ha sido como para repetir”, comentaba Pili Arruti junto a sus compañeras tras la sesión de fotos llevada a cabo en el carrousel de Alderdi Eder. “Es que todo el mundo ha sido simpatiquísimo con nosotras. Nos han tratado como a unas reinas”, apuntó Lolo Bräuer.

Todas tienen más de 80 años pero muchas ganas de comerse el mundo, tal y como demostraron a Cristina Pérez, que este año les ha dedicado su especial de Navidad por ser uno de los colectivos que más afectado se ha visto por la pandemia. “Son personas que viven en su mayoría solas y hacer actividades del tipo que sea, yoga, lectura... les da la vida”, comenta Pérez, que recuerda: “Si tienes salud y actitud, la edad solo es un número”.

A través de las redes sociales, solicitó mujeres con más de 80 años, alegres y con ganas de pasárselo bien y así contactó con las cinco seleccionadas. “Hicimos una primera toma de contacto para que me conocieran y se conocieran entre ellas y así no vinieran tan nerviosas. Otro día fuimos de tiendas para elegir la ropa y lo de hoy ya ha sido increíble”, cuenta la organizadora de este especial de Navidad.

Una de las peluqueras da los últimos retoques a Pili Arruti Arnaitz Rubio

Ayer, las recibió desde las 8.30 horas en el hotel Londres de Donostia, donde tras un buen desayuno, les brindó una sesión de peluquería y maquillaje, para después vestirlas de punta en blanco y hacer con ellas una sesión de fotos de lo más especial en el carrusel de Alderdi Eder. “Ha sido súper gracioso y una experiencia increíble. Imagínate, no se han querido ir sin subirse al caballito. Imagínate para estas mujeres de casi 90 años, que la gente les ha sacado fotos por la calle, echándoles piropos...Se han sentido increíble”, celebra. “Al principio han llegado muy nerviosas pero luego se han ido relajando, creciendo y al final se han venido arriba”, insiste.

Moda inclusiva: pionera

Cris Pérez comenzó hace nueve años su aventura con los especiales de Navidad. Su objetivo era dar visibilidad a mujeres que, por una u otra razón, no tenían cabida en el mundo de la moda. “Me siento muy orgullosa porque cuando empezamos hace nueve años no había nada de esto. Ahora se empiezan a ver desfiles de moda más inclusivos, pero antes no había nada y me siento un poco la pionera. Cada año le damos la oportunidad a un montón de mujeres a la que homenajeamos, porque trabajamos por una sociedad cada vez más inclusiva a través de la moda y de la imagen”, explica.

Por sus manos han pasado mujeres con algún tipo de discapacidad, enfermas de cáncer, sanitarias... y ahora, ancianas. “Queríamos enfocarnos en la mujer vitamina, con mucho color y mucha alegría. No nos hemos centrado tanto en que la foto salga perfecta o que la ropa esté perfecta, sino en que ellas tengan una experiencia, que disfruten. Porque de nada nos sirve que la foto salga bonita si ellas no lo han pasado bien. Esto no es un evento de moda, es una experiencia y mi misión es que lo pasen bien y no lo olviden nunca”, remarca.

Las modelos charlan en un momento de la sesión Arnaitz Rubio

A la vista del resultado, Pérez puede sentirse orgullosa de lo logrado. Sus cinco protagonistas no dejaron de sonreír en toda la jornada y de repetir que no se imaginaban que “esto iba a ser así”. “Desde luego, es como para repetir”, coincidían Lolo, María Luisa, María Ángeles, Pili y Cristina, que se mostraban agradecidas por haberse sentido modelos por un día.