El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha admitido la personación como acusación particular de cuatro políticos afectados en la causa en la que investiga un presunto espionaje a Unidas Podemos desde el Ministerio del Interior: Aina Vidal (Esquerra Verda), Joan Baldoví (Compromís), Félix Alonso Cantorne y Joan Mena Arca, ambos de IU.
En el marco de esta causa, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 ha pedido a la Unidad de Asuntos Internos de la Policía que informe sobre las razones y motivos por los que se efectuaron las búsquedas o acceso a las bases de datos policiales respecto de estos diputados, han informado a EFE fuentes jurídicas.
Una vez conozca el resultado de esta pesquisa, Pedraz decidirá si mantiene o no la personación, sin que mientras tanto puedan solicitar diligencias.
Por otro lado, ha acordado incorporar a la causa el resultado de una serie de conversaciones de chat entre Francisco Martínez y Eugenio Pino.
Pedraz abrió esta causa en febrero al admitir la querella que interpuso Podemos contra cargos del Ministerio del Interior y de la Policía en 2015 y 2016 por presuntas investigaciones irregulares al partido.
Jorge Fernández Díaz, excluido
El magistrado excluyó de la causa al exministro Jorge Fernández Díaz al no ver indicios suficientes contra él, si bien acordó investigar con relación a estos hechos al ex número dos de Interior aquellos años en los que gobernaba el PP, Francisco Martínez, y al ex director adjunto operativo (DAO) de la Policía Eugenio Pino, entre otros.
Martínez denunció recientemente en un escrito al juez la falta de "rigor" de la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Policía en su oficio sobre las consultas realizadas desde bases de datos policiales a 55 diputados de Podemos entre 2015 y 2016, entre los que se ha incluido a Yolanda Díaz (ahora en Sumar).
El exsecretario de Estado de Interior apuntaba que de las búsquedas en bases de datos policiales aportadas al juzgado, "docenas" no se corresponden con la identidad de integrantes de la formación morada sino con la de otros ciudadanos con nombres iguales o similares.
También "puede comprobarse fácilmente", proseguía el escrito, que las búsquedas encontradas "no son más que el resultado de una actividad policial normal y ordinaria, como la realizada sobre cualquier ciudadano" por diversas razones como "renovación del DNI y pasaporte, controles en aeropuertos, datos sobre hospederías (que se remiten a la policía por los propios hoteles), denuncias interpuestas por estas personas y un largo etcétera".