Hasta 10 horas trabajando a destajo y en relevos tuvieron que emplear medio centenar de Bomberos de 4 parques de Bizkaia, para extinguir por completo el voraz incendio que ayer hacia las dos y media de la madrugada se desataba en un edificio del número 15 de la calle Estazinoa, donde el antiguo concesionario de Opel, cerca de las vías del tren y la cementera de Lemoa.
Las llamas se originaban por causas que se investigan,en el sótano, en un taller, donde se almacenaban 4,000 litros de gasoil y 50 toneladas de plástico que fueron algo así como "la tormenta perfecta" al comenzar a arder. Las altísimas temperaturas que alcanzan estos materiales tan inflamables hacían de hecho que una 3 horas después, hacia las 5h de la mañana de ayer, el edificio se viniese abajo. Así nos lo confirmaba en Onda Vasca, a primera hora, Mikel Gantzegi, jefe de guardia de los bomberos forales de Bizkaia: "es un edificio de hormigón, ha aguantado bastante tiempo, pero en un momento dado la planta se ha venido abajo, las llamas han ascendido por el resto del edificio, y rápidamente, en muy pocos minutos ha quedado todo derruido".
VECINOS "CON LO PUESTO"
Afortunadamente no hay que lamentar pérdidas personales, sólo una mujer tuvo que ser trasladada al hospital del Galdakao por inhalación de humo. Pero la tragedia sacude a las familia, 10 vecinos, que se han quedado sin su vivienda.
El susto fue tremendo para los 25 vecinos que pasadas las 2h de la mañana, escuchaban en su puerta, la llamada de la ertzaintza urgiéndoles a abandonar el edificio cuanto antes. Nada más conocerse la noticia, se ponía en marcha el dispositivo para realojar en un hostal del municipio a las 10 personas cuyas viviendas se han venido abajo. Así nos lo contaba aquí en ONDA VASCA a primera hora de la mañana la alcaldesa de Lemoa, Saioa Elejabarrieta: "el ayuntamiento pondrá todos los recursos a su disposición para ayudar a estas familias, y analizar junto a los Servicios Sociales sus necesidades de forma individualizada". De hecho algunos vecinos tuvieron que abandonar su casa de forma tan precipitada que ni siquiera portaban consigo su documentación personal.
CERRAR VENTANAS POR LA HUMAREDA
Dada la gran cantidad de humo generada y los componentes tóxicos que se estaban quemando, Ricardo Ituarte, director de Emergencias del Gobierno vasco, explicó que "a los vecinos de Arribi les hemos aconsejado que permanezcan en sus casas y con las ventanas cerradas". El viento, de componente norte, empujaba hasta este barrio una gran humareda.
CORTE DE TRÁFICO
Durante toda la jornada estuvo cortado un carril de la carretera BI-635, aunque se dio paso alterno por el otro y el resto del tráfico se desvió por la N-240. Todavía hoy continúa cortado un carril para facilitar los trabajos de vigilancia y retén de los Bomberos Forales de Bizkaia.