Pico de la Cruz y otras cimas del cordal de Grumeran

Partiendo del centro de interpretación de Meatzaldea, en Peñas Negras, en pleno corazón de la comarca minera, recorremos buena parte del cordal de los montes de Triano (Grumeran) con el espectacular Pico de la Cruz como plato fuerte del día.

DATOS PRINCIPALES

· Kilómetros: 13,6

· Desnivel positivo: 600+

· Duración: corriendo 1:50h / Caminar - correr: 2:35h / Senderismo 3:15(+30 min niños)

DESCRIPCIÓN

En el corazón minero de Bizkaia se encuentra el centro de interpretación Meatzaldea de Peñas Negras, donde se ofrece una exposición sobre la historia de la cuenca minera de Bizkaia, destacando el mineral de hierro como recurso ambiental. También se pueden observar piezas restauradas de antiguas explotaciones mineras en el exterior. Además, el centro proporciona información sobre la geología y la historia de la zona minera, incluyendo la presencia romana y los cambios económicos y sociales provocados por la minería.

Toma ese nombre de Peñas Negras de un pequeño conjunto de picachos oscuros que se encuentran al sur. La recomendación es dejar la visita para después de la ruta que tenemos hoy por todos los alrededores de este centro de interpretación, recorriendo el cordal los montes de Triano (Grumeran) desde Pico de la Cruz hasta el Alto de Galdames. Una vez dejado el vehículo –si se elige esta opción– en el aparcamiento habilitado en la parte exterior de Peñas Negras, comenzamos la ruta en el camino que asciende por la parte izquierda. Un duro repecho nos dejará en unos metros en una pista ancha y cómoda por la que transitaremos sin problema, ya que al ser bastante pedregosa, aunque haya humedad, el barro no hará mucho acto de presencia.

Con dos kilómetros de ruta a nuestras espaldas llegamos a uno de los cruces importantes del recorrido, el collado de la Breña. Se trata de un lugar donde confluyen varias pistas, por la que venimos nosotros, una de bajada para la zona de Galdames, otra de ascenso a varias cotas y la que finalmente cogemos, que es un camino que rodea dos cimas y que con posterioridad acometeremos su ascensión por otro sendero. Sumamos otros dos kilómetros de caminar fácil para llegar a otro collado, el de Mustariaga. En este momento el camino desde aquí hasta el primer buzón del día es de ida y vuelta, ya que tras hacer un par de cimas regresaremos a dicho collado.

El entorno cambia; hasta el momento íbamos por una pista con árboles a ambos lados, y ahora nos sumergimos en la oscuridad y la frondosidad de un bosque. La luz mengua, el terreno se vuelve marrón, la hierba, presente en mucha parte del recorrido, desaparece, y el camino se empina. Es breve el paso por este pequeño bosquecito pero, sobre todo en época veraniega, se agradecerá, ya que el cambio de temperatura se hace notar. Salimos del bosque, y por una gran explanada al aire libre, donde ya disfrutamos de una gran vista abierta con el monte Eretza emergiendo poderoso, recorremos el último tramo que nos separa de Pico de la Cruz. Nos situamos en la base de este curioso monte, totalmente rocoso, a diferencia del resto de cimas que nos rodean, todas bastante, por no decir muy, herbosas.

Ascendemos sin camino aparente, con cuidado, por la roca, y en menos de cinco minutos nos plantamos en la réplica de la Cruz del Gorbea que corona su parte más alta (802 m.). Lo acompaña debajo otra réplica del funicular de Larreineta, modo de llegar a La Arboleda si no queremos venir en coche. Hay que destacar que en sus faldas se encuentran las cuevas de Arenaza, con pinturas rupestres, uno de los yacimientos más importantes de Euskal Herria.

GASTERANTZ, GANERAN Y PICO MENOR

Las vistas son de 360 grados y desde aquí divisamos nuestros siguientes objetivos. No el primero, que será, nada más bajar y desandar este último tramo hasta justo antes del bosque, Gasterantz (801 m.). Desde allí observamos el Gran Bilbao e incluso Udalaitz al fondo. Atravesamos el bosque en descenso hasta el collado de Mustariaga nuevamente, pero en lugar de continuar por el evidente camino de la derecha, seguimos de frente para, tras un par de duros repechos, hacer la tercera cima del día, Ganeran (822 m.), que es una de las más representativas de todo el macizo de Grumeran.

Llega uno de los mejores momentos de la jornada, la travesía por el cresterío buscando el collado Grumeran, donde enlazamos con el collado de La Breña nuevamente previo paso por Pico Menor (728 m.) cuarta cota del día. El descenso de este último monte, si no encontramos sendero fácilmente debido a la tala de todos sus alrededores, es mejor hacerlo retrocediendo al collado anterior y de ahí buscar La Breña.

DOS COTAS MAS

Nos quedan dos cotas por delante, pero si fuéramos justos, desde La Breña podemos acceder fácilmente a Peñas Negras. Para los que quieran dos muescas más en su cinturón, una dura subida a medio camino entre bosque y terreno despejado nos deja en la cima de Pico Mayor (742 m.), sin vistas por estar el buzón enclavado en el bosquecillo. Finalmente, tras una breve bajada y otro repecho hacemos cima en el Alto de Galdames (715 m.), con su famoso y curioso buzón en forma de espada.

Ya tan solo nos resta bajar, por una pista muy cómoda, al final de nuestra salida, ubicada en el centro de interpretación de Peñas Negras. Si aún quisiéramos aportar un extra más a nuestra travesía podemos, justo nada más bajar del Alto de Galdames, cuya loma está cubierta con pinos, trepar a nuestra izquierda al promontorio de roca caliza que es Peña Pastores. En conclusión, esta es una ruta ni muy larga ni muy corta, con el desnivel justo donde recorremos todo o casi todo el cordal de Grumeran, donde los cazadores de cimas y buzones podrán satisfacer su ansia con facilidad, así como disfrutar de otro entorno fabuloso de nuestras montañas.

PLANES ALTERNATIVOS

Hoy proponemos un par de planes extras para ampliar la jornada:

· Conocer y recorrer La Arboleda: Reconvertido hoy en día en un espacio de ocio y esparcimiento, La Arboleda fue un pueblo minero en donde se extraía el mineral de hierro para después trasladarlo a los Altos Hornos de Sestao. Fundado en 1877, conserva su carácter férreo, reflejado en las casas de madera de los trabajadores, los sindicatos mineros, así como la tienda de abastos. Hay que visitar la balsa El Ostión, al lado del área recreativa, junto al Pozo Las Cármenes se sitúa la Mina Blondies y al fondo, ya cerca de la carretera, la balsa de Parkotxa, antiguo lavadero de metal, actualmente reconvertido en estanque, usándose ahora como escuela de pesca. El paseo por La Arboleda se puede hacer en poco más de una hora. El terreno donde se ubicaba antes la Mina Pikwik se ha transformado en pastizales adehesados con pino y protegidas por el viento, entre las grietas, hay zonas con mesas, así como con bancos para poder hacer un picnic y observar el paisaje. En el pueblo hay un buen número de restaurantes donde comer. Se recomienda optar por un buen plato de alubias, que vienen acompañadas de sus “sacramentos”: chorizo, morcilla o costillas de cerdo.

· Museo de la minería del País Vasco: Esta es una asociación formada entre otros por exmineros y trabajadores de la siderurgia, que ven, en plena crisis industrial, como los elementos que han formado parte de lo que hasta ese momento había sido la esencia de Bizkaia, empiezan a ser abandonados. Una vez creada la asociación, que desinteresadamente hace esfuerzos por recuperar y conservar los elementos que la actividad minera ha generado, como lo son vagonetas, herramientas, fotografías y documentos; con la intención de no dejar caer en el olvido esta parte de nuestra historia, en el año 2002 se crea la Fundación Museo de la Minería del País Vasco. En el año 2001 el Museo abre sus puertas en el Antiguo Matadero del barrio de Gallarta. Desde entonces no ha dejado de editar monografías, organizar exposiciones y actividades de difusión para todo tipo de público. http://www.meatzaldea.eus/