Sor María Pilar Martínez es una monja alavesa, natural de Barriobusto, que desde hace más de 50 años trabaja en Bolivia tratando de facilitar las condiciones de vida de las personas más desfavorecidas de la sociedad, principalmente mujeres.
De un tiempo a esta parte, lo hace al frente del Centro Transitorio para Víctimas de Trata y Tráfico de Seres Humanos, que atiende a mujeres explotadas por la violencia sexual y comercial, muchas de ellas con hijos a su cargo.