Enfundada en abrigos, gorros, bufandas y aún con la resaca del roscón de Reyes, la gente espera a la entrada de algunas tiendas la subida de las persianas. Es el pistoletazo de salida, el primer día de rebajas o de rerebajas, ya que desde principios de diciembre ha habido carteles de descuentos que la clientela ha aprovechado para los regalos navideños. No obstante, siempre hay marcas que no lanzan sus ofertas hasta el 7 de enero y otras en las que el precio baja más una vez que han pasado Melchor, Gaspar y Baltasar en cabalgata.
En la entrada principal de los grandes almacenes de La Paz hacen cola decenas de hombres y mujeres, que se cobijan bajo el letrero del establecimiento cuando comienza a lloviznar, en lo que se convierte al cuarto de hora en una entrada ordenada a las tiendas; nada que ver con aquellas carreras de antaño en busca de la ganga de la temporada. La mayoría se dirige directamente a las escaleras mecánicas para subir a las secciones de ropa, ya sea de caballero, mujer o juvenil, dejando diáfana la planta baja.
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Patricia hace tiempo revisando el móvil y andando de un lado para otro para no quedarse fría con los ocho grados que marca un termómetro en la calle. Confiesa que no viene de rebajas sino a cambiar un regalo navideño. “Normalmente, el primer día de rebajas me pilla trabajando; además, no soy de las que destino una cuantía concreta a rebajas, compro cuando lo necesito”, indica. “He venido a primera hora por si luego no hay talla”, apunta.
Visto y probado
María Ángeles ya tiene vista y hasta probada la prenda que va a comprar en la sección de caballeros. Viene a tiro fijo. “No suelo ser de las que viene a primera hora, pero hoy lo he hecho porque como ya sé lo que quiero, no vaya a ser que se venda antes...”, dice. “Sí que se notan los descuentos, hay prendas en las que te puedes ahorrar hasta 50 euros y, además, aunque en Navidad hay descuentos especiales, muchas marcas de ropa no los hacen hasta después de Reyes, y en invierno la ropa de abrigo es más cara que en verano”, argumenta. “Creo que hoy será un buen día para los comercios porque es sábado”, opina.
Elena, así es como le llaman en Vitoria ante la dificultad de pronunciar su nombre chino, viene a cambiar una cazadora verde que le han regalado a la niña por otra rosa, aunque no sabe si habrá en ese color. "Se la han comprado en Navidad y dice que ella quería en rosa, ya sabes cómo son las niñas a determinada edad...”, sonríe. Piensa que las rebajas están “muy bien” y, aunque tiene que trabajar, echará un vistazo a la ropa infantil y si ve algo que le gusta lo comprará porque “los niños están en esa edad de 5 años en la que cambian tanto de talla...”, explica.
A pesar de ser sábado y de que los escolares todavía no han comenzado las clases, también hay comercios cerrados, de descanso semanal y sin grandes letreros que llamen a comprar; simplemente una nota informativa sobre el periodo de rebajas, como en la zapatería de al lado: del 2 de enero al 19 de marzo, y es que, ahora, la flexibilidad es tal que en muchos comercios las rebajas empezaron el 2 de enero. Lo detalla muy bien Mimi mientras atiende una tienda de original y colorida ropa de mujer en Dato.
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“Hoy, primero los niños tienen que jugar un rato con los regalos de Reyes; después, las familias salen a la calle de rebajas y creo que va a ser un buen día de ventas, va a haber mucha gente, verás”. Ha colocado tres burros con distintos porcentajes de descuentos de un 10, 15 y 50%. Su balance de la temporada navideña es positivo. “Se nota que la gente está animada a comprar y creo que la campaña de rebajas también va a ir bien”. En su comercio, el pistoletazo de salida fue el 2 de enero, pero “la gente ya comenzó a comprar los regalos navideños la semana de black friday, allá por el puente de diciembre”, recuerda.
Hay de todo
En cuanto al comportamiento de la clientela, hay de todo: “la gente compra lo que necesita, pero también alguna prenda con la que se ha encaprichado, no creo que se marque un presupuesto para gastar en rebajas o, si lo hace, no lo dice; otros muchos vienen a cambiar una prenda que les han regalado, ya que con las tallas no siempre se acierta, y lo que sí he notado es que muchas mujeres se auto regalan algo para Reyes, ya que así aciertan”, precisa.
En una de las zapaterías de la calle Diputación, la dependienta prefiere no dar su nombre, pero sí cuenta que la campaña navideña ha sido buena “sobre todo en esta calle que ha habido mucha gente y turistas sin prisas y más dispuestos a gastar cuando salen de su ciudad de residencia;el 26 de diciembre, un día después de Navidad, pensaba que no iba a entrar nadie y fue todo lo contrario y también el 27, 28 y, en general, toda esa semana, me sorprendió muchísimo”, rememora. Prefiere no mojarse sobre la caja que hará en rebajas, pero hasta ahora el balance es bueno, también de ventas on line. “Hay personas a las que no les importa no probarse antes unos zapatos, no ves que ahora todos los artículos se pueden devolver”, narra mientras guarda las botas marrones que se ha probado una clienta. “Lo que más se vende esta temporada es el botín y la bota de media caña, y en color claro”, puntualiza.
De forma similar transcurre el primer día de rebajas en la zona centro de General Álava y en la de Sancho el Sabio y Gorbea, entre carteles que van desde el 20 y 30% hasta el 60 y 70% de descuento; otras tiendas que simplemente cuelgan uno genérico y comercios que en su interior mantienen el precio habitual y únicamente rebajan artículos seleccionados; incluso hay jerseys que lucen una engañosa pegatina roja de 39,90 euros, el mismo precio de su etiqueta original hace semana y media.
Y en las calles, luces que comienzan a apagarse con el final de la Navidad y otras que se encienden en los escaparates con el inicio de las rebajas de enero, mientras los gasteiztarras pasean con bolsas y bolsas que incitan a comprar.