El Ayuntamiento de Eibar va a dar continuidad a las labores de poda iniciadas en la campa de Arrate en 2023.
En concreto, va a proceder a la poda y a la limpieza de este espacio tan valorado por los vecinos y los visitantes de la zona, comenzando por la fila más cercana a la carretera para reducir los riesgos.
Debilitamiento
Hayas, fresnos y tilos son algunas de las especies de árboles más destacadas de la zona.
Su gran crecimiento en altura, unido a la poca distancia de separación que hay entre ellos, ha incidido en una menor recepción de luz y, consecuentemente, en el ahilamiento y el debilitamiento de algunos ejemplares.
Esta situación exige actuar sobre ellos con la aplicación de medidas como el trasmocho, que contempla el descabezado o cortado de los árboles a cierta altura para que su tronco gane en fortaleza y produzca brotes.
Amenaza del viento
La situación de riesgo por el debilitamiento de los árboles se ve agudizada por las recientes talas de los pinares que se han llevado a cabo en zona anexas, según señalan desde el Ayuntamiento de la villa armera.
Estas talas han alterado las corrientes de aire y han producido una intensificación de los vientos que ha incrementado el peligro de roturas de los árboles al no contar con la protección que les ofrecían los pinares.
Todo ello ha dado lugar a un aumento del riesgo para las personas que transitan por la zona que ahora se quiere minimizar con estas labores de poda.
Presupuesto
La poda se llevará a cabo por la empresa Azpetxea y la operación tendrá un coste de 4.000 euros.