Podemos ha criticado que la última cumbre de la OTAN implica avanzar en "más militarización" y "belicismo", para proclamar también que el compromiso de facilitar el proceso de adhesión de Ucrania a la OTAN a la Alianza Atlántica una vez haya finalizado la guerra es una "absoluta irresponsabilidad".
Así se ha pronunciado el área de internacional de la formación morada, mediante varios mensajes en las redes sociales tras la reunión de la OTAN en Vilna, donde no ha apreciado ninguna iniciativa que apueste por las conversaciones de paz.
"Seguiremos defendiendo que la OTAN y su deriva belicista jamás nos traerá seguridad. Necesitamos una política de seguridad común alejada del seguidismo de terceras potencias y una política clara y propia de construcción de paz. Europa debe reaccionar", ha trasladado la formación morada.
A su juicio, constata que la cumbre de Vilna avanza en la dirección tomada en la última cita de Madrid el año pasado: "más militarización, belicismo y apuntalar el rol de la Alianza en el Este", y ninguna iniciativa que incluya "conversaciones de paz o la protección de los derechos de las poblaciones".
"El compromiso oficial de facilitación del proceso de adhesión de Ucrania a la OTAN una vez la guerra haya finalizado es una absoluta irresponsabilidad para con la seguridad de los pueblos de Ucrania y Europa", ha enfatizado.
También ha cuestionado las negociaciones para levantar el veto de Turquía a la entrada de Suecia en la OTAN, pues bajo su criterio lleva a la desprotección de refugiados y solicitantes de asilo kurdos en el país nórdico. "Una vez más, el compromiso de la OTAN con los Derechos Humanos brilla por su ausencia", ha arremetido Podemos.
A su vez, ha enfatizado que queda claro que se "mantendrá el envío de armamento" al conflicto y que ello incluirá "misiles de largo alcance e incluso el de bombas de racimo, prohibidas por la legislación internacional". Y ello lleva al partido morado a concluir que "la seguridad del pueblo ucraniano no podrá venir de la mano de la vulneración más básica del derecho".
Finalmente, ha recriminado que el secretario general de la Alianza Atlantica, Jens Stoltenberg, "vuelve a presionar por el objetivo del 2% del PIB en inversiones militares, algo que cumple los EEUU y principalmente los países del Este. "Este objetivo nos aleja de nuestra autonomía estratégica y nos hace aún más dependientes de la organización y sus fracasos", ha zanjado.