Podemos no olvida a Iñigo Errejón, aquella inseparable pareja de Pablo Iglesias que acabó enfrentado y desertando con su particular aventura. Su nombre salió ayer a colación con ánimo de confrontar con Yolanda Díaz, a quien el líder de Más País arropó el pasado domingo en su acto, principalmente para recordarle a ella que también a él le sedujeron ciertas “voces” para que emprendiera su propio camino bajo la predicción de que sacaría “un muy buen resultado electoral” que, al final, no se produjo. Los cabezas visibles moradas deslizaron un discurso consensuado. En 2019, según el portavoz parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, el relato mediático unánime era: “Errejón va a sacar un resultado excelente, Podemos está muy desgastado, Podemos debe reconocer que ya no sirve, Errejón sí genera ilusión”. El desenlace fue que Más País “sacó dos escaños” y Podemos “un gobierno”, ironizó. Le siguió Irene Montero. “Esto ya lo hemos vivido”, esgrimió la ministra, mostrando su preocupación por las dudas de Díaz sobre el papel de Podemos en el próximo ciclo electoral y por si se halla escuchando a quienes puedan estar diciéndole que no cuente con ellos, “como le pasó a Errejón”.
A Podemos “nos preocupan esas dudas o esa falta de compromiso rotundo con la unidad, pero eso no va a alterar nuestro compromiso con ella y que sigamos teniendo la mano tendida para hacer un acuerdo de coalición entre Podemos y Sumar”, enfatizó Montero en Radiocable, con la aspiración de revalidar el Gobierno de coalición, e incluso aspirar a presidirlo, lo que pasaría por un acuerdo electoral con Sumar que incluya la convocatoria de primarias abiertas para resolver las incógnitas sobre el protagonismo de los morados. “Podemos tiene un compromiso férreo con la unidad”, añadió la secretaria general, Ione Belarra, que puso como ejemplo el pacto en Valencia entre Unides Podem y Esquerra Unida para ir juntos a las autonómicas del 28-M, así como que Podem presente “170 candidaturas de unidad” en Catalunya. “Nuestra hoja de servicios en esta materia está más que demostrada”, destacó, para incidir: “Ahora, quien tiene que decidir si quiere ser la candidata de la unidad es Yolanda Díaz”. Belarra reconoció que representan espacios y proyectos diferentes, pero confía en el entendimiento y le urge a comprometerse firmemente y cuanto antes para no desviarse del objetivo de lograr de nuevo un Ejecutivo que siga avanzando en derechos.
La “progresía mediática”
Las diferencias con Sumar no son tanto programáticas como estratégicas, sobre cómo hacer política, según la titular de Igualdad, que reivindica la capacidad demostrada por su partido esta legislatura para asumir el “coste político” de “hacer posible lo imposible” y mantenerse “firme”. “La gente de Podemos estamos ahí para dar la cara”, proclamó Montero, que defendió la importancia de que estén fuertes también para el futuro, porque los “ataques feroces” contra ellos “no es por lo que hemos hecho, es por lo que todavía somos capaces de hacer, si tenemos más fuerza para gobernar”. La dirigente morada fue más allá y trascendió de la figura de Errejón, y es que recordó que en 2016, desde la denominada “progresía mediática” y algunas personas de la política institucional, como –“creo recordar”– Gaspar Llamazares o Joan Baldoví (Compromís), “apostaban” por un gobierno de Ciudadanos, de Podemos y del PSOE. De paso, aprovechó para desmentir también la “mitología” que hay sobre la tensión entre Podemos y Sumar y cómo se evidencia en las reuniones del Consejo de Ministros, asegurando que se saludan con Díaz y que también llegan a acuerdos “muy importantes” para avanzar en derechos. “Es mucho más terrenal de lo que la gente se puede pensar”, precisó Montero.
Apelaciones todas ellas que redondeó Pablo Iglesias, que persiste en dictar el camino: “Sé que muchos militantes y simpatizantes de Podemos se sienten muy dolidos, pero creo que toca mantener la cabeza fría y seguir defendiendo la unidad con primarias”. El exvicepresidente del Gobierno alertó en las redes de que “hay intereses demasiados obvios en intentar romper, una vez más, la izquierda”.
Asturias
Crisis interna. Irene Montero niega que exista una crisis interna en la federación del partido en Asturias tras la exigencia de la candidata, Covadonga Tomé, a respetar el proceso de primarias, restándole importancia a estas críticas dirigidas concretamente a la secretaria general del partido, Ione Belarra. Según la ministra de Igualdad y dirigente de Podemos, el expediente no tiene que ver con las primarias.