Pogacar despliega el arcoíris en el desierto

Érase una vez Pogacar. Así arranca la fábula, la fantasía y el cuento de una nueva aventura del astro esloveno, el ciclista a decenad de victorias pegado. Buscará el campeón del Mundo reforzar su reino; el latifundio en el que conviven las carreras mas grandes, sean estas de tres semanas o Monumentos y clásicas. El esloveno quiere erigir un nuevo imperio vestido con el arcoíris.

“Siempre es un sueño llevarlo. Se siente irreal correr cada día con el maillot arcoíris. Volver al país del equipo con este maillot es alucinante y bueno enseñarlo en la primera carrera del año”, determina el esloveno, que alcanza su debut sin interferencias durante la pretemporada, pero con las incógnitas propias de no haber competido aún. Nada hace pensar, empero, que el rendimiento del esloveno haya declinado ni un ápice. Este lunes comienza su gira.

De hecho, su intención es superar el desempeño de la campaña anterior, un objetivo que se antoja desmesurado, aunque no para el esloveno volador, un ciclista que no se puede comprender desde la normalidad y la lógica. “Siempre empiezas con dudas, pero la preparación es buena y las sensaciones también. Crucemos los dedos para que esta temporada sea mejor de la pasada”, estableció en el marco de la presentación del UAE Tour.

El ciclista que la pasada campaña conquistó el Giro y el Tour, hazaña que no tenía eco desde Marco Pantani, el Mundial, Lieja e Il Lombardia además de otros logros, se pone en marcha en el UAE Tour, carrera que responde al dinero saudí, el mismo que patrocina a la escuadra de Pogacar y que baña en dinero al esloveno, con una ficha estimada de diez millones de euros y una cláusula de rescisión sobre los 120 millones de euros.

Máximo favorito

En la tierras fértiles del oro negro amanece el esloveno, máximo favorito para la carrera que va hasta el domingo con una crono de 12 kilómetros el segundo día de competición antes de la ascensión a Jebel Jais, final en alto de la tercera etapa, y el cierre con otra cima, en Jebel Hafeet.

Esos son los días que determinarán la prueba saudí. Buscará almacenar más victorias en su bodega de carga Pogacar. De momento, el esloveno suma 88 en su museístico palmarés. Después de una campaña sideral, que reforzó su idilio con las victorias en un actuación legendaria, solo apta para los elegidos, Pogacar busca el próximo reto. Superarse.

Sus exhibiciones lisérgicas en el Giro y en el Tour (venció la general de ambas citas tras levantar los brazos en seis etapas en cada una de ellas con una suficiencia aplastante), carreras que logró con las manos en los bolsillos y silbando, fijan la hoja de ruta de un ciclista que triunfó de todas las maneras posibles con una jerarquía abrumadora.

Intimidante de punta a punta a pesar de su rostro de niño y los mechones que sobresalen del casco y que le conceden una apariencia que le alejan de su carácter depredador y su insolente ambición.

Fijados los límites o tal vez con el deseo de superarlos, Pogacar comienza la defensa del año Pogacar en una competición que le es familiar. Fue campeón en 2021 y 2022. Del esloveno se espera la trilogía en el UAE Tour mientras compone aún el puzzle competitivo del calendario, con un claro componente monumental.

Milán-San Remo, Lieja, Flandes y Lombardía aparecen en su almanaque de carreras. En su persecución de la excelencia, Pogacar quiere, al fin, vencer en Vía Roma para fijar en su muro de los logros la Milán-San Remo. El resto son carreras que le pertenecen.

Un calendario por definir

Fijo para el Tour, donde defenderá el título y buscará su cuarta corona, se desconoce qué otra grande, Giro o Vuelta, escogerá el esloveno o si se decanta por alguna de ellas. El esloveno mantiene el secreto aunque es sabido que desea cincelar su nombre en el panteón de campeones de las tres grandes. Le resta acuñar su identidad en la Vuelta. Sin embargo, no quiso destapar si escogerá otro gran escaparate además del Tour.

El esloveno prefiere esperar a la campaña de las clásicas de primavera para tomar una decisión definitiva. “No puedo confirmar nada más de mi calendario ahora. En estos momentos estoy concentrado en el UAE Tour”, argumentó el esloveno cuando se le preguntó sobre su presencia en la Vuelta. Pogacar despliega el arcoíris en el desierto.