El Deportivo Alavés regresó este sábado a Ibaia junto a su gente, después de una semana complicada con dos derrotas, y a pesar de realizar un partido más que serio, no pudo llevarse la victoria. El encuentro tuvo dos partes muy distintas, con el Sporting poniendo en apuros a las locales en los primeros 45 minutos y con las albiazules dominando después.
Las de Mikel Crespo supieron aguantar muy bien en sus peores momentos, para luego hacerse dueñas del encuentro. Sin embargo, las vitorianas no pudieron celebrar ningún gol y eso que tuvieron ocasiones más que de sobra para hacerlo, pero el balón no quiso entrar y el partido terminó con el empate a 0.
Las de Mikel Crespo intentaron jugar como les gusta, saliendo con el balón desde atrás, pero no hubo manera, ya que las de onubense no dejaban ni una sola asistencia local sin presionar y el partido se jugó en todo momento en territorio albiazul. La primera parte alcanzó el ecuador y el Alavés con calma fue recuperando espacio y dejó de sufrir las acometidas visitantes.
Eso sí, las locales todavía no habían generado peligro, pero era cuestión de tiempo, ya que la capitana Alba Aznar ya se había hecho dueña de la medular. La propia jugadora catalana comenzó una jugada que abrió a la banda izquierda para que Ane Miren conectara a la perfección con Miku, pero el disparo de la japonesa lo detuvo Chelsea. Los últimos minutos de la primera parte volvieron a pertenecer a las visitantes que no dejaron de merodear la portería que defendía Cris.
El paso por los vestuarios no sentó muy bien a las vitorianas, ya que en los primeros instantes, la zaga albiazul perdió un balón muy peligroso ante Mayra, pero en el mano a mano ante Cris, la delantera no acertó. A diferencia con la primera parte, ambos conjuntos arriesgaron más y por consecuencia se generaron más huecos, algo que benefició al Alavés. Esa situación la aprovechó Alba que tuvo terreno por delante para conectar con Naima, quien centró de maravilla para que Carrillo de cabeza casi lograra estrenar el marcador.
El entrenador local, Mikel Crespo, fue el primero en mover el banquillo dando entrada a la pichichi del equipo, Chamorro. La delantera paraguaya enseguida empezó a demostrar su calidad y por la banda derecha generó un gran centró al que no llegó ni Carrillo ni Ane Miren por pocos centímetros. El Alavés se estaba encontrando más cómodo en estos segundos 45 minutos y es que dio la sensación de que a las de Antonio Toledo se les acabó la gasolina para seguir presionando tan arriba.
Mikel Crespo aprovechó el momento para meter más pólvora arriba con Sanadri. El Sporting pareció aceptar su rol de intentar sorprender a las albiazules mediante los contraataques y en alguno casi lo consigue gracias al buen físico de Kanteh y Mayra. El encuentro encaró sus últimos diez minutos y el Alavés tuvo su mejor ocasión tras una gran triangulación entre Alba, Ane Miren y Sanadri, pero el balón no quiso entrar.
Finalmente, las "Gloriosas" se tuvieron que conformar con un punto que sirve, eso sí, para cortar la racha negativa.