Para hacer más amenos los vuelos, muchas compañías proyectan en las pantallas de sus aviones películas, siempre que el vuelo sea lo suficientemente largo como para que dé tiempo a verla entera. Así, quien no quiera dormir, leer, escuchar música, mirar por la ventanilla, hablar con el pasajero de al lado o simplemente dejar pasar el tiempo puede conectar sus auriculares y entretenerse con una historia audiovisual. Y, lógicamente, son filmes aptos para todos los públicos, ya que es raro que en algún viaje no haya menores de edad a bordo.
Proyectan una película para adultos
Pero en un vuelo que enlazaba hace unos días Sidney con Tokio un problema técnico impidió que los pasajeros pudieran elegir individualmente qué película querían ver de entre las opciones del sistema de entretenimiento. Así que la la tripulación de la aerolínea Qantas decidió proyectar un mismo filme en todas las pantallas para que al menos tuvieran algo que ver. Pero algo falló a la hora de seleccionar la película y, según explica el periódico británico The Guardian, se emitió una cuya clasificación es para mayores de 18 años.
Se trataba de Daddio, una cinta estrenada en junio de 2024, dirigida por Christy Hall, protagonizada por Sean Penn y Dakota Johnson y que estaba calificada como para adultos debido a su lenguaje y a sus escenas sexuales y de desnudos. Conforme la película fue avanzando, la tripulación recibió quejas de unos cuantos pasajeros, que no la consideraban adecuada teniendo en cuenta que había niños y niñas en el avión y que definieron lo visto como “cuarenta minutos de penes y tetas”.
Imposible apagar las pantallas
Además, los problemas técnicos que habían experimentado en el sistema de entretenimiento impedían a cada pasajero apagar su pantalla. Al no poder hacerlo tampoco el personal de tripulación, finalmente se decidió interrumpir la película en emisión y poner en su lugar una infantil, que también se proyectó en todas las pantallas.
Se investiga esa elección
La aerolínea australiana emitió un comunicado posteriormente en el que pedía perdón a los pasajeros que se habían quejado del contenido. “Está claro que esa película no era adecuada para todos los pasajeros y pedimos sinceras disculpas con ellos por esta experiencia”, afirmaba. Además, aseguraba que están “revisando cómo se seleccionó la película”, ya que la “práctica habitual” en los casos en los que falla el sistema de elección por parte de cada pasajero es proyectar “una película familiar” de entre la “lista limitada” de que disponen en cada vuelo.