El uso de protector solar es fundamental para proteger la piel de los efectos dañinos del sol, especialmente durante el verano. Sin embargo, un error común que muchas personas cometen es utilizar el protector solar del año pasado. Según expertos en dermatología y cuidado de la piel, esta práctica puede no ser tan segura ni efectiva como se piensa. A continuación, se exploran las razones por las que no deberías utilizar el protector solar del año pasado.
Pérdida de efectividad
Una de las principales razones por las que los expertos desaconsejan el uso de protector solar del año anterior es la pérdida de efectividad. Los ingredientes activos en los protectores solares, como el óxido de zinc, el dióxido de titanio y los filtros químicos como el avobenzona, pueden degradarse con el tiempo. La exposición al calor, la luz solar y el aire puede acelerar este proceso de degradación. Como resultado, el protector solar puede no ofrecer el mismo nivel de protección contra los rayos UV que cuando era nuevo.
Cambios en la fórmula
Otra razón importante es que los protectores solares pueden experimentar cambios en su fórmula con el tiempo. La separación de ingredientes, el cambio en la textura o la aparición de un olor extraño son señales de que el producto ha comenzado a deteriorarse. Estos cambios no solo reducen la efectividad del protector solar, sino que también pueden causar irritación en la piel. Los expertos recomiendan siempre revisar la apariencia y el olor del protector solar antes de usarlo, y desecharlo si presenta alguna anomalía.
Fecha de caducidad
Todos los protectores solares vienen con una fecha de caducidad impresa en el envase. Esta fecha indica hasta cuándo el producto mantendrá su efectividad garantizada. Usar un protector solar caducado puede significar que los ingredientes activos ya no funcionan como deberían. Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, los protectores solares deben mantener su eficacia original durante al menos tres años. Sin embargo, esto no significa que sea seguro usarlo después de este período, especialmente si ha sido almacenado en condiciones no ideales.
Claudia, farmacéutica con más de 500.000 seguidores en TikTok que comparte en su cuenta vídeos de lo más interesantes y efectivos con recomendaciones y consejos de salud, nos explica qué significa el símbolo PAO (Period After Opening en inglés) en las cremas solares y cómo interpretarlo.
El símbolo PAO en los envases de productos cosméticos, incluida la crema solar, indica el período de tiempo durante el cual el producto se considera seguro y efectivo después de haber sido abierto. Este símbolo suele representarse como un pequeño tarro de crema abierto, acompañado de un número y la letra "M", que indica el número de meses de validez del producto una vez abierto.
Por ejemplo, si ves el símbolo PAO con "12M", significa que la crema solar es efectiva y segura para su uso durante 12 meses después de la primera apertura del envase. Pasado este tiempo, la estabilidad y la efectividad del producto pueden verse comprometidas, y es recomendable no usarlo para garantizar una adecuada protección solar.
Protección inadecuada
El uso de protector solar caducado o degradado puede llevar a una protección inadecuada contra los rayos ultravioleta. Esto aumenta el riesgo de quemaduras solares, envejecimiento prematuro de la piel y cáncer de piel. La Sociedad Española de Dermatología y Venereología (AEDV) advierte que una protección solar insuficiente puede tener consecuencias graves a largo plazo. Por lo tanto, es crucial asegurarse de que el protector solar que se está usando sea efectivo y esté dentro de su período de validez.
Recomendaciones de los expertos
Para evitar los riesgos asociados con el uso de protector solar del año pasado, los expertos ofrecen varias recomendaciones. En primer lugar, es importante almacenar el protector solar en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa y del calor extremo. Esto puede ayudar a prolongar la vida útil del producto. En segundo lugar, se debe revisar regularmente la fecha de caducidad y el estado del protector solar. Si el producto ha cambiado de color, textura o olor, debe ser desechado.
Además, es aconsejable comprar protectores solares en cantidades que se puedan utilizar en una temporada. Esto minimiza la probabilidad de tener que usar productos viejos en el futuro. También se recomienda usar protector solar de manera generosa y reaplicarlo cada dos horas o después de nadar o sudar, para asegurar una protección continua.